Noticias - 4 octubre, 2016
El primer lunes de octubre de cada año se celebra el Día Mundial del Hábitat. Desde Greenpeace llamamos a tomar conciencia sobre la responsabilidad de toda la humanidad con el cuidado del hábitat para las generaciones futuras.
El primer lunes de octubre de cada año se celebra el Día Mundial del Hábitat.
El hábitat es, por definición, el lugar que posee las condiciones apropiadas para que viva un organismo, una especie o una comunidad animal o vegetal. Desde hace varios años los seres humanos estamos poniendo en serio peligro la mayoría de los hábitats de nuestro planeta. Esto implica poner en riesgo el futuro, no solo de las especies, sino también de toda la humanidad.
Los bosques están siendo amenazados en todo el mundo: los desmontes y los incendios son las principales causas de la destrucción de este hábitat en el que habitan cientos de especies de animales y plantas. Estos ecosistemas son fundamentales en la regulación del clima, el mantenimiento de las fuentes y caudales de agua y la conservación de los suelos, su desaparición provoca inundaciones, desertificación y aumento del cambio climático.
Los glaciares son nuestras principales reservas de agua dulce para el futuro. Sin embargo, la minería se ocupa de destruir constantemente estos ecosistemas. Y lo que es peor es que en nuestro país no existe una Ley de Glaciares que los proteja. Desde Greenpeace exigimos al gobierno una Ley Glaciar que defienda a todos nuestros glaciares para siempre.
Los océanos son otro de los hábitats por los que trabajamos. Generan más de la mitad del oxígeno que respiramos y son el refugio de cientos de especies. Las principales amenazas para estos ecosistemas son la sobrepesca, la contaminación y el cambio climático. Es importante pedir por la creación de Santuarios Marinos en todo el mundo que protejan a este hábitat y sus especies. Firma ahora para exigir que se vote la creación de un Santuario en el Atlántico Sur.
Por último, el Ártico,es uno de los ecosistemas determinantes para la vida de las personas en la Tierra. En él no solo habitan especies únicas como los osos polares, sino que además funciona como el aire acondicionado del planeta: regula el clima para toda la humanidad. Las perforaciones petroleras, las explosiones sísmicas y la pesca industrial son las principales amenazas para la región. Suma tu voz para frenar la destrucción del Ártico.
Todos somos responsables de la protección de nuestros hábitats, no solo para el presente sino también para cuidar el planeta que le dejamos a las próximas generaciones.
Dona ahora a Greenpeace para que podramos seguir defendiendo el medio ambiente, haz click aquí.