En México, cada persona consume alrededor de 76.7 kg de carne al año, esta cifre incluye carne de pollo, porcino, bovino, procesados y pavo. Es urgente reducir su consumo y también la producción, que crece de forma exponencial y descontrolada, afectando nuestra salud y al planeta. 

Este #LunesSinCarne te presentamos nueve datos preocupantes sobre las repercusiones para la salud de la producción y consumo excesivos de carne:

1.- El 65% de toda la carne consumida a nivel mundial es carne roja (carne de vacuno, porcino, ovino, caprino y equino). El consumo de carne roja y procesada está asociado al incremento de enfermedades no transmisibles como el cáncer, obesidad, diabetes tipo II, enfermedades cardiovasculares, enfermedades del intestino (diverticulitis) o enfermedades crónicas del hígado. 

2.- Por cada 50 g de ingesta diaria de carne procesada aumenta el riesgo de padecer cáncer colorrectal un 18%. 

3.- La ingesta de una porción diaria de carne roja (procesada o sin procesar) incrementa un 31% el riesgo de sufrir un infarto. 

4.- Las enfermedades transmitidas por alimentos contaminados como la salmonella, campylobacter, e. coli, entre otras están asociadas en gran medida al consumo de alimentos de origen animal y en particular al de aves de corral. 

5.- La alarmante resistencia a los antimicrobianos se está desarrollando en parte debido al mal uso de estos medicamentos en el ganado saludable. Sólo en la Unión Europea las bacterias resistentes matan cada año 25.000 personas. 

6.- La calidad del aire cerca de las granjas industriales es mala y normalmente contiene partículas peligrosas y gases. 

7.- Al menos un 30% de las personas que trabajan en granjas industriales padecen de episodios de asma y bronquitis. 

8.- Una granja de 1.000 vacas produce tantos excrementos como una ciudad de 300.000 habitantes. Los excrementos del ganado contaminan los cursos de agua, dejando a muchas poblaciones sin acceso a un recurso vital como es el agua. 

9.- El consumo de agua contaminada por nitratos (provenientes de los excrementos de los animales y de los fertilizantes sintéticos) está relacionado con el desarrollo de cánceres gástricos.

La Organización Mundial de la Salud establece que una alimentación sana es aquella donde predominan los alimentos de origen vegetal: frutas, verduras, legumbres, frutos secos y cereales integrales. 

No te pedimos que dejes de consumir carne si no quieres, solo te pedimos que reduzcas tu consumo. Cualquier persona puede hacerlo y la primera beneficiada será tu salud.