En esta época del año, y debido a las actividades relacionadas con las festividades propias del mes de diciembre y enero, solemos contribuir sin darnos cuenta, en generar un aumento en el tránsito vehicular, en el consumo de energía (electricidad, gas y gasolina), y en el consumo en general, o sea, en la generación de basura.

Es el mes de las luces adornando calles y hogares, y efectivamente se ven muy bonitas, pero si tan sólo en los dos millones de viviendas que hay en el DF se ponen a funcionar las series de navidad por sólo 5 horas diarias, en 30 días se habrán emitido a la atmósfera 10 millones 740 mil kilogramos de gases de efecto invernadero (según cálculos de la dirección de cambio climático del gobierno de la ciudad).

De acuerdo con información de la Secretarías de Medio Ambiente de la Ciudad de México y del Estado de México, durante el invierno las condiciones meteorológicas no son favorables para la dispersión de contaminantes en el aire, y durante los meses de diciembre y enero se presentan los mayores niveles de contaminación.

La disminución de la temperatura, el aumento en la duración de la noche y los cielos despejados son condiciones favorables para la formación de inversiones térmicas, que facilitan que los contaminantes quedan atrapados en las capas más bajas de la atmósfera muy cerca del suelo, incrementando los niveles de contaminación con un riesgo importante para la salud de la población.   

Por otro lado, de acuerdo con información de empresas que realizan estudios de mercado (5,6) en la temporada de fiestas decembrinas, los mexicanos gastamos en promedio entre tres mil y hasta 5 mil pesos en regalos navideños (menos del 3% de los mexicanos gasta menos de 500 pesos en obsequios); lo que además no sólo lastima nuestros pulmones, también nuestro bolsillo: el 70 por ciento de los mexicanos iniciamos el año nuevo con deudas; y un cuarto de los mexicanos iniciamos el año con deudas de entre 5 mil y 10 mil pesos, resultado de la compra de obsequios (en lo que más gastamos es en ropa, juguetes y calzado), y otros gastos para cenas y fiestas tradicionales de navidad y año nuevo (6,7).

Para ello te recomendamos: …

  • Utiliza el transporte público y medios de movilidad no motorizados, como caminar o la bicicleta.

  • Reduce al mínimo el uso del automóvil. Si lo utilizas, disminuye el número y distancias de los viajes, comparte los viajes con tu familia, amigos y compañeros para asistir al trabajo o a los lugares de celebración.

  • Disfruta aprendiendo con nosotros cómo hacer algunos de tus regalos en lugar de comprarlos.

  • #HazloNoLoCompres