Me llamo María Fernanda, tengo 13 años y estudio el segundo año de secundaria. El domingo pasado participé en una actividad de Greenpeace para pedirle a Bimbo que deje de usar plaguicidas que enferman a la gente.
Nunca antes había estado en una protesta, pero esta vez quise ir porque el medio ambiente es muy importante para mí. Cuando me enteré que los fertilizantes y plaguicidas que se usan en el campo para abastecer a Bimbo eran tan peligrosos que podrían causar cáncer, quise hacer algo para que la gente lo supiera.
Así que fui y a lado de otros niños hicimos una actividad con una botarga de oso y usamos máscaras antigases para llamar la atención de la gente. Yo sostuve una manta con la leyenda “La salud no es un juego, es un derecho”, lo cual creo que es muy cierto.
Había también personas de Greenpeace entregando folletos para informar a la gente cuál es el problema, pero no todos prestaban la debida atención y eso te hace sentir mal porque lo único que queríamos era crear conciencia del daño que le estamos haciendo a nuestro planeta y del que Bimbo también es responsable por no hacer nada para que no se usen sustancias tóxicas.
Me gusta pensar que si las personas (todas, también las empresas y el gobierno) cooperaran reciclando, ahorrando, reutilizando, no tirando basura en las calles, fijándose en lo que comemos y eligiendo lo que haga menos daño a su salud y al planeta, poco a poco haríamos un cambio.
Ojalá que cada vez seamos más personas interesadas en tener un mundo mejor y que cosas como ésta sirvan para crear conciencia en la gente que nos vio, la que me lee y también en Bimbo para que cambie por nuestra salud y del medio ambiente y entienda también que lo que hace nos afecta a todos.