Este 21 de marzo es el Día Internacional de los Bosques. Cada año la ONU dedica esta fecha a la concientización sobre la importancia de todos los tipos de ecosistemas boscosos y árboles. Para Greenpeace México y el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez este día es todavía más importante pues también se cumplen 4 meses del injusto encarcelamiento de Don Ildefonso Zamora, el defensor de los bosques.

Don Poncho tiene 55 años. Es un líder indígena tlahuica, una cultura que entre otras cosas ha desarrollado una extraordinaria relación con la naturaleza, basada en el respeto y en el agradecimiento por todo lo que la tierra provee. Él Ha pasado una tercera parte de su vida, junto con su familia y comunidad, dando literalmente todo por proteger parte del Gran Bosque de Agua, una zona que abarca 120 mil hectáreas entre el Estado de México, Morelos y la Ciudad de México, y que brinda tres cuartas partes del líquido a esta última mega urbe. Ildefonso y los comuneros se erigieron como los defensores inquebrantables de los bosques de San Juan Atzingo, en el municipio de Ocuilan de Artega.

Esta larga lucha por la defensa de los bosques de la avaricia de los taladores ha sacudido su vida y la de su familia. En 2007, los taladores, criminales cobijados por algunas autoridades locales, asesinaron a su hijo Aldo e hirieron su hermano Misael, quien hoy tiene 25 años. Meses después, el entonces presidente Felipe Calderón, y el entonces gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto, prometieron justicia. Nunca llegó.

A mediados del año pasado, militares secuestraron a Misael, sin embargo, fue la respuesta rápida de la comunidad la que logró su liberación. Cuando el joven era trasladado con rumbo desconocido sus amigos y vecinos impidieron que se consumara el plagio. Por esta agresión ya existe una queja formal ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos. Las agresiones no terminaron ahí, el 20 de noviembre las autoridades ministeriales irrumpieron en la oficina de Ildefonso para detenerlo, golpearlo, acusarlo de un delito que nunca cometió y trasladarlo al Centro de Readaptación Social de Tenancingo.

Esta escandalosa historia de injusticia cometida por las autoridades del Estado de México, encabezadas por el gobernador Eruviel Ávila ya llamó también la atención de los medios de comunicación nacionales e internacionales. Periódicos globales como El País nos contaron cómo el defensor de los bosques malvive en prisión. El equipo de Los Reporteros de Televisa nos habló de la sed de justicia que existe en Atzingo, el diario Reforma, al igual que los portales Animal Político y SinEmbargo, entre otros ya dieron cuenta de las irregularidades del proceso en su contra.

La fuerza de la gente y su apoyo en las redes sociales es visible. Más de 14 mil personas ya firmaron la petición en línea para exigir a Eruviel y al procurador de justicia estatal, Alejandro Gómez, desistirse de la acusación falsa contra Ildefonso. Cientos de personas ya mandaron su foto promoviendo #IldefonsoLibre. Hoy las organizaciones, acompañadas por todo este esfuerzo promovieron un amparo para exigir la liberación del líder indígena.

Está en manos del juez Jacinto Martínez Santiago acabar con esta injusticia, o perpetuar un régimen de criminalización de defensores y defensoras de medio ambiente y derechos humanos. Hoy, cuando la herida por el cobarde asesinato de la también defensora y ambientalista hondureña Berta Cácereces sigue abierta y la ONU trata de recordarnos que los bosques son vida, el juez Martínez tiene la oportunidad de revindicar al sistema de justicia mexicano y dar esperanza a las miles de personas que, como Ildefonso, creen que todavía un mundo más verde y justo es posible.

Si aún no has firmado para apoyar la petición de Ildefonso Zamora entra a este enlace. Si ya lo hiciste, ayúdanos compartiendo el vínculo y la historia con todos tus contactos. Por último, mándanos tu foto con el hashtag #IldefonsoLibre y súmate a este esfuerzo de la gente, del Centro Prodh y de Greenpeace.  Pronto los y las tendremos informadas de los próximos pasos para dar y recorrerlos juntos porque aunque vayamos despacio, vamos muy lejos.

#IldefonsoLibre