México enfrenta una gran amenaza: que una empresa privada se apropie del alimento de todos los mexicanos.
¿Qué se necesita para enfrentarla? Voluntad política y valor para ponerle un freno a las empresas trasnacionales como Monsanto, que con todo su poder económico están presionando al gobierno federal para que autorice las siembras de maíz transgénico a escala comercial en nuestro país.
Hasta ahora, Enrique Peña Nieto no ha sido capaz de frenar esta amenaza. Por eso, este jueves Greenpeace le lanzó un reto al primer mandatario: prohibir de manera definitiva las siembras de maíz genéticamente modificado y garantizarnos un México libre de transgénicos.
Dos activistas de esta organización ambientalista escalaron 15 metros de altura sobre el asta bandera del Zócalo capitalino para desplegar una manta de 30 metros cuadrados dirigida al titular del Ejecutivo. Al centro, un maíz portando los colores de la bandera mexicana y el sello “Propiedad de Monsanto”; el mensaje: Peña Nieto ¡tu eres el responsable!.
La intención es recordarle a Peña Nieto que está en sus manos el defender nuestro maíz o entregarle su control a una empresa privada, condenando a este país a la pérdida de su biodiversidad y soberanía alimentaria.
Ahí, en el ícono del centro del país, los dos escaladores portaron la voz de miles de mexicanos que le han exigido al presidente de la República proteger el grano base de nuestra cultura y alimentación.
Algunos dicen que son locuras, otros que son riesgos absurdos… en Greenpeace creemos que lo que hacen los escaladores es poner a la vista de todos, exponer con convicción y valor un tema que no puede ser ignorado por las autoridades de este país ¡ya no más! Porque es el futuro del campo y de nuestro alimento el que está en juego.
Enrique Peña Nieto debería ser capaz de emitir un claro, contundente e innegociable NO al maíz transgénico.
Angélica Simón, Coordinadora de prensa de Greenpeace en México