😭“Las cosas buenas casi no se cuentan, pero cuentan mucho”, dice la propaganda del gobierno federal en un afán de presumir supuestos avances, lo cierto es que la frase se escucha cada vez más vacía ante la falta de hechos palpables.

Hace unos días, el barco Rainbow Warrior de Greenpeace estuvo en el Puerto de Veracruz, para respaldar el trabajo de organizaciones como el Centro Mexicano de Derecho Ambiental, la Asociación Interamericana para la Defensa del Ambiente (AIDA) e investigadores de la Universidad Veracruzana en la protección de los arrecifes.

Imagen de Pablo Padilla

Los especialistas dieron a conocer el hallazgo de un arrecife coralino conocido como La Loma, ubicado justo frente a las obras de la ampliación del Puerto de Veracruz, dentro del Parque Nacional Sistema Arrecifal Veracruzano (PNSAV), que por su localización e importancia requiere ser reconocido y puesto bajo protección especial por estar dentro de un Área Natural Protegida.

Un par de días después de este anuncio la Administración Portuaria Integral de Veracruz, responsable de la construcción, señaló que ellos identificaron seis arrecifes en la zona que ya fueron reportados a la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) y a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), autoridades responsables de atender esta situación.

Hasta ahora nada. Ni Conanp ni Semanrnat se han pronunciado sobre la buena noticia del hallazgo de nuevos arrecifes, sin duda una cosa buena que las instituciones ambientales del país han decidido no contar. Prefieren guardar silencio sobre la ubicación de los arrecifes que Apiver asegura haber notificado y mucho menos han dicho qué harán para la protección de estas estructuras coralinas de las cuales desconocía su existencia pero que si están dentro de los límites de una zona protegida están obligados a conservar.

El caso del Parque Nacional Sistema Arrecifal Veracruzano es una muestra de lo que sucede a lo largo del país: decretos de áreas naturales protegidas en el papel pero sin un programa de manejo para saber con claridad qué se puede y no hacer en esas zonas. El PNSAV lleva 25 años como un área protegida, en 2012 se modificó su poligonal, se autorizó una ampliación portuaria cerca de ella, hoy aparecen nuevos arrecifes en sus límites y el Parque Nacional sigue sin un programa de manejo.

Imagen de Oscar Castro

Desde la sociedad civil hemos insistido en la urgente necesidad de que la Semarnat y Conanp intervengan como autoridades garantes de los recursos naturales del país y que actúen en la protección del medio ambiente como un derecho humano emitiendo los programas de manejo de las áreas naturales protegidas que tiene pendiente. Solo así, con acciones concretas podríamos decir que hay avances que deben presumirse, por ahora pedimos a Semarnat y Conanp que tome cartas en este asunto porque la protección de los arrecifes, eso sí cuenta mucho. 

Este artículo también fue publicado en SinEmbargo.Mx