cigarros plásticos

Imagen tomada de Stylist 

Basta ver una película de los años 70 u 80 para darnos cuenta de que antes era común fumar en los espacios públicos cerrados, sin que nadie tomara en cuenta cómo esto perjudicaba la salud de los demás. Hoy,  imaginar a alguien fumando dentro de un avión, autobús o en un restaurante es absolutamente inconcebible ¿Cómo pasó esto?

Después de publicarse numerosos estudios sobre los daños a la salud que produce el tabaquismo y el incremento que significa para el gasto en la salud pública, la legislación cambió y prohibió fumar en los espacios públicos, se impidió a las tabacaleras promocionar en espacios deportivos, en la televisión, etcétera.  

Con el consumo de plásticos pasa algo similar: es normal que nos den bolsas de plástico de un solo uso en el súpermercado, comprar lo que sea y que venga envuelto en plástico, hemos aceptado que es normal utilizarlo como antes era normal que se fumara en lugares cerrados. ¿Por qué no cambiar las leyes?

En el pasado, la lucha contra el tabaquismo nos demostró que el cambio de las legislaciones es muy importante para transformar la percepción de las personas y dejar de normalizar lo que es dañino para todos. De acuerdo con cifras de la Organización de Naciones Unidas  ya hay más de 60 países tomando acción para regular estos mal llamados “desechables”.

La normalización del uso de estos plásticos está cambiando con impuestos específicos y otras prohibiciones, lo cual contribuye en gran medida ya que de esta manera evitamos que utensilios plásticos de corta vida útil lleguen a nuestros océanos afectando a más de 600 especies según registros de publicaciones científicas.

Usar desechables debe ser tan mal visto como fumar en espacios públicos cerrados porque nos dañan a todos. Para ello, le apostamos a los movimientos ciudadanos que están surgiendo por todo el país para pedir regulaciones sobre estos utensilios y a su vez exigimos a los legisladores modificar las leyes para que la responsabilidad recaiga en quienes nos venden los productos en plástico.

Las corporaciones son responsables de innovar para ofrecernos nuevas formas de consumo, nuestra tarea será buscar alternativas de compra y señalar a quienes están contaminando nuestro planeta con plástico.

Hagamos que el uso de plásticos desechables sea el nuevo NO FUMAR.

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