Un mes sin justicia para Aldo Zamora

Noticia - 14 junio, 2007
Frente a la lentitud de las autoridades del Estado de México para hacer justicia en el asesinato de Aldo Zamora es necesaria la intervención del gobierno federal y de organismos internacionales, señalaron familiares de Aldo, Greenpeace y el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez. Oficinas de Greenpeace en 15 países han escrito cartas al gobierno mexicano exigiendo justicia.

Ildefonso Zamora, padre de Aldo Zamora, demanda justicia para su hijo asesinado por talamontes así como seguridad para su familia y para todas las personas que protegen el Gran Bosque de Agua.

Los operativos realizados en el Parque Nacional Lagunas de Zempoala con gran despliegue de efectivos han dado nulos resultados y siguen libres los talamontes responsables del ataque ocurrido el pasado 15 de mayo, en el que Aldo Zamora Gómez fue asesinado y su hermano Misael resultó herido.

“Lo único que han hecho las autoridades estatales son operativos espectaculares en los que, por supuesto, no han encontrado a los asesinos de mi hijo. Estamos desesperados porque no se nos hace justicia y por eso vamos a acudir a autoridades federales y a organismos internacionales”, explicó Ildefonso Zamora Baldomero, presidente de bienes comunales de San Juan Atzingo y padre de Aldo.

El indígena tlahuica, que desde 1998 ha denunciado la alarmante tala de los bosques de su comunidad, explicó que continúan las amenazas y el hostigamiento por parte de integrantes de las bandas de talamontes, a pesar de la presencia de policías estatales. Ildefonso teme por su seguridad, la de su familia y la de los demás integrantes de la comunidad que han trabajado en la defensa de sus bosques.

Ildefonso Zamora, el Centro Pro y Greenpeace acudirán a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y a la Procuraduría General de la República (PGR) para que se haga justicia y se actúe para acabar con la tala ilegal en el Parque Nacional Lagunas de Zempoala y sus linderos.

Se espera que la CIDH solicite las siguientes medidas cautelares:

Que se lleve a cabo una investigación pronta y efectiva que permita identificar, procesar y sancionar a los responsables materiales e intelectuales del homicidio de Aldo Zamora Gómez.

Que de común acuerdo se adopten las medidas necesarias para resguardar la integridad de la familia de Ildefonso Zamora, así como la integridad física y psicológica de los otros comuneros, en particular Paulino Neri Carlos, suplente de Ildelfonso Zamora; Nicolás Hernández Alberto, secretario de bienes comunales, y Alejandro Ramírez Raymundo, tesorero de bienes comunales y jefe del consejo supremo tlahuica, y sus respectivas familias.

Por su parte, Greenpeace explicó que a raíz de una carta enviada al titular de la PGR, Eduardo Medina Mora, denunciando los hechos del 15 de mayo pasado, la procuraduría dio inicio a una averiguación previa por homicidio, lesiones y tala de recursos forestales maderables en el Parque Nacional Lagunas de Zempoala. Esta denuncia ya está en manos del Ministerio Público y la Unidad Especializada en Investigación de Delitos contra el Ambiente.

Asimismo, Gerd Leipold, director ejecutivo de Greenpeace Internacional, envió una carta al presidente Felipe Calderón solicitándole que actúe de manera inmediata para detener a los asesinos de Aldo, se proteja a la familia Zamora Baldomero y la de los comuneros de San Juan Atzingo, y se detenga la tala ilegal en los bosques de la región. Con la misma petición, las oficinas de Greenpeace en Holanda, Alemania, Bélgica, Dinamarca, España, Francia, Finlandia, Italia, Suecia, Suiza, Australia, China, Nueva Zelanda, Argentina y Canadá enviaron cartas a las embajadas de México en sus países. Además 6 mil 269 ciudadanos mexicanos le han exigido a Enrique Peña Nieto, gobernador del Estado de México, y al procurador mexiquense Abel Villicaña que hagan justicia en este caso.

“No dejaremos de exigir justicia y de señalar que el tema de la tala en la región es complejo y no se va a resolver con operativos `sorpresa´. Esta problemática involucra al menos a los estados de México y Morelos ya que la madera obtenida ilegalmente en Zempoala es transportada a Huitzilac, Morelos, para su almacenamiento, transformación y comercialización. Es urgente y necesario que el gobierno federal encabece las acciones para poner fin al problema de la tala ilegal en Zempoala”, explicó Patricia Arendar, directora ejecutiva de Greenpeace México.

A esta demanda de justicia se unió Rodolfo Montiel, campesino ecologista que en mayo de 1999 fue perseguido y encarcelado por su trabajo contra la tala depredadora en los bosques de la Sierra de Petatlán y Coyuca de Catalán, en Guerrero. Montiel envió una carta al presidente Calderón que dice: “Quiero pedirle a usted ahora que está en sus manos haga algo en favor de todos los ecologistas del país así como también nos brinde protección y seguridad a todos los ecologistas y a nuestras familias, que sean llevados a juicio los asesinos de Aldo Zamora”.

Los bosques de San Juan Atzingo se encuentran dentro del Gran Bosque de Agua, el cual alberga 2 por ciento de la biodiversidad mundial, abastece tres cuartas partes del agua que se consume en la Ciudad de México, dota de agua a los ríos Lerma y Balsas, ayuda a mitigar el cambio climático y sus impactos en la región. Sin embargo, la zona de las Lagunas de Zempoala-Huitzilac es considerada como una de las 15 zonas críticas de tala ilegal en México, con el 60 por ciento de esta actividad.

AUDIOS
Ildefonso Zamora, presidente de bienes comunales de San Juan Atzingo y padre de Aldo.
Patricia Arendar, directora ejecutiva de Greenpeace México.

ACTÚA: exige justicia para los defensores e los bosques

Por denunciar a los talamontes, Aldo Zamora, un joven tlahuica de 21 años comprometido con la defensa de los bosques de su comunidad, perdió la vida. Aunque sus atacantes están perfectamente identificados, las autoridades no los han detenido aún. Ayúdanos a exigir justicia para Aldo y para quienes defienden los bosques que nos dan el agua y el aire.