Abre la secretaría una investigación para esclarecer el destino millonario del programa Proárbol, según revela este jueves el diario El Universal; las auditorías constataron que en entidades como Chiapas “hay viveros que no tienen ni una planta, y zonas en las que debiera haber cientos de miles de árboles están desérticas”, cita el periódico
Galeana, Nuevo León._Greenpeace demostró durante una investigación realizada este año, el fraude de Proárbol
* Carta abierta de Greenpeace al secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales
Luego del reportaje publicado este miércoles por el diario EL UNIVERSAL, la Secretaría de la Función Pública (SFP) abrió una investigación para esclarecer el destino de los 2 mil 700 millones de pesos invertidos en el programa Proárbol.
Este jueves, el diario refiere también en su nota principal que Función Pública efectúa tres auditorías al Programa Nacional
Forestal, a petición de diputados federales de la Comisión de
Vigilancia de la Auditoría Superior de la Federación.
Por su parte, 120 organizaciones civiles agrupadas en el Observatorio Ciudadano
de Vigilancia Ambiental, (OCVA) exigieron este miércoles a las autoridades
federales información clara sobre el programa Proárbol, impulsado por
la administración pública en lo que va del sexenio.
Greenpeace México realizó una investigación en 2008 para denunciar el fraude de Proárbol, el programa favorito del licenciado Felipe Calderón. La organización reveló que unos 15 millones de árboles plantados como parte
de este programa corresponden a especies clasificadas como exóticas y están
prohibidas legalmente. Y que el 90 por ciento de lo plantado había muerto; esto bajo el amparo de un programa millonario que nada sirve para salvar los bosques de México.
Por el contrario, las especies exóticas afectan el ecosistema y no pueden
sobrevivir porque están plantados en regiones áridas no aptas para su
crecimiento.
La noche de este miércoles, la Semarnat aún enviaba material sobre Proárbol a las
oficinas designadas por la SFP para realizar el cotejo de documentos.
Las auditorías, según se cita en el diario, constataron que en entidades como Chiapas
“hay viveros que no tienen ni una planta, y zonas en las que debiera
haber cientos de miles de árboles están desérticas”.
Proárbol ha sido
cuestionado en numerosas ocasiones por diversas organizaciones, debido a que
la reforestación, no funciona para detener la
aguda deforestación que sufre nuestro país, la quinta a nivel mundial y
la segunda de América Latina.
El PAN, PRD y PRI, en la Cámara de Diputados, se pronunciaron por que el Ejecutivo castigue a los responsables de la presunta corrupción que permea en Proárbol.
Sobre estas anomalías, Beatriz Bugeda, vocera
del Observatorio Ciudadano de Vigilancia Ambiental (OCVA) que
representa a 120 organizaciones; Luis Miguel Robles Gil, vicepresidente
de la Unión de Grupos Ambientalistas —que integra a 107 organismos no
gubernamentales—, y Patricia Arendar, directora ejecutiva de Greenpeace
México, exigieron al gobierno federal que se transparente el uso de los
recursos utilizados en Proárbol.
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