Ciudadanos del mundo piden protección del maíz mexicano

Con la imagen de Yum Kaax, Dios maya del maíz y la juventud (1), y la leyenda Mexico birthplace of maize, GMO-free now!, miembros de Greenpeace y voluntarios hicieron un llamado al gobierno mexicano a proteger el maíz nativo de la contaminación con transgénicos.

En cada una de las embajadas de México en Alemania, Austria, China, Sudáfrica, España, Francia, Hungría, Israel y Rumania se entregó una misiva dirigida al embajador solicitándole su intervención para hacer llegar la demanda de protección a la cuna del maíz a Enrique Peña Nieto.

México es centro de origen (2) y diversificación constante del maíz; principal reservorio de semillas de este grano que es el cuarto más importante del planeta (3), y es aquí desde donde se distribuyeron las variedades de maíz que actualmente se cultivan alrededor del mundo.

Aquí en México, en los estados de Puebla, Jalisco, Chihuahua, Guanajuato, Hidalgo, Aguascalientes, Nuevo León, Veracruz, Querétaro, Estado de México, Sinaloa y en la Ciudad de México Greenpeace también demandó la protección del maíz como su principal alimento. En la capital del país un grupo de activistas llegó a Palacio Nacional portando la imagen de Yum Kaax con el mensaje México cuna del maíz, libre de transgénicos ¡Ya!

En la sede del Poder Ejecutivo, Greenpeace entregó la demanda de protección al maíz mexicano y de la consecuente negación de las solicitudes de siembra comercial de maíz transgénico firmada por 42,336 mexicanos. La organización recordó que ésta fue la primera demanda que recibió el gobierno de Enrique Peña Nieto  y luego de 162 días la organización no ha recibido respuesta alguna.

Por el contrario las autoridades han recibido las nueve solicitudes de Monsanto, Pioneer y Dow Agrosciences para sembrar maíz transgénico a escala comercial en los estados de Coahuila, Chihuahua, Durango, Sinaloa y Tamaulipas, (4) aun cuando permitirlo sería condenar toda la superficie cultivable de maíz blanco -con el que se elaboran las tortillas de los mexicanos- a la contaminación genética con maíz amarillo que es propiedad de las empresas, cultivado para fines forrajeros e industriales y no para la alimentación de la gente.

“Las plantas silvestres y las variedades nativas pueden adquirir las características de las plantas transgénicas y predominar sobre las plantas de su entorno, lo que puede causar graves desequilibrios en los ecosistemas. Cualquier liberación de plantas transgénicas en centros origen y diversidad, ya sea como semillas o como producto de importación para la industria, es un riesgo para nuestra herencia biológica, nuestras raíces culturales y la seguridad alimentaria mundial”, declaró Aleira Lara, coordinadora de la campaña de Agricultura sustentable y transgénicos de Greenpeace México.

“El maíz por su diversidad en formas y usos, tiene un significado e importancia histórica y presente tal, sobre todo en el medio rural, que se ha calificado a los mexicanos como “gente de maíz”. Este patrimonio genético, nacional y mundial, que se ha generado a lo largo de milenios enfrenta ahora el grave riesgo de ser contaminado por flujo genético. Es nuestro deber custodiar su conservación y con ello exigir la protección de la soberanía alimentaria de los mexicanos”, demandó Lara.

Al instalar la moratoria a la siembra de transgénicos en 1999, el gobierno y la comunidad científica de México le habían lanzado un mensaje muy claro al mundo: este país no pondría en riesgo su economía, su biodiversidad y su cultura, para instalar un modelo de negocio monopólico para la producción de maíz. Sin embargo, en octubre de 2009, el gobierno de Felipe Calderón decidió levantar la moratoria y permitir que empresas como Monsanto, DowAgrosciences, Pionner y Syngenta, pudieran hacer siembras experimentales y piloto, con la promesa de abrirles el camino para la producción comercial de grano patentado en los campos de cultivo en los que se cosecha maíz mexicano, a pesar de que estas siembras contaminarán las 59 razas y miles de variedades que durante milenios se han desarrollado en nuestro territorio (5).

“Hoy estamos nuevamente ante esta incertidumbre. Por lo que llamamos al presidente de México actuar con responsabilidad y evitar la contaminación de la gran diversidad de maíces mexicanos, prohibiendo la siembra de maíz transgénico en su territorio”, concluyó la organización.

Fuentes:

1. Yum Kaax, Dios maya del maíz y la juventud  custodiaba el alimento sagrado de los mayas: el maíz. Era el patrono de la labranza y los códices lo presentan ocupado en gran variedad de trabajos agrícolas. Lo mismo que el maíz, tenía muchos enemigos y por su juventud necesitaba de la ayuda de otras deidades, especialmente de Chaac, el dios de la lluvia. Su mayor aliado era el hombre, quienes con sus ritos atraían la lluvia sobre los granos, liberándolos de las malas hierbas y ahuyentando a las plagas.

2.- Los centros de diversidad son aquellos lugares en los cuales la relación entre las especies de cultivo y las especies silvestres de las que proceden es aún evidente. En estos lugares las comunidades locales cultivan y consumen miles de variedades de arroz, papas, maíz, entre otros cultivos regionales básicos. Los centros de diversidad no son sólo el pilar de la seguridad alimentaria sino también de las tradiciones culturales

3.- Kato, T.A., C. Mapes, L.M. Mera, J.A. Serratos, R.A. Bye. 2009. Origen y diversificación del maíz: una revisión analítica. Universidad Nacional Autónoma de México, Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad. 116 pp. México, D.F.

4.- Estatus de solicitudes de permiso de liberación al ambiente de Organismos Genéticamente Modificados ingresadas en 2012 y 2013. http://www.senasica.gob.mx/?id=4443. Información tomada el día 07 de mayo del 2013 a las 17:39.

5.- Centros de diversidad. La riqueza biológica de los cultivos tradicionales, herencia mundial amenazada por la contaminación genética. 2000. Greenpeace. México

Mayor información con Angélica Simón en el teléfono  04455 4084 5320 y el correo