Greenpeace fue a la puerta del Congreso para instalar una alfombra roja y un cartel con la leyenda "A votar la Ley de Basura Electrónica" a modo de bienvenida para los legisladores nacionales, que en la última sesión ordinaria tenían la oportunidad de aprobar la Ley, antes de que perdiera estado parlamentario. Pero la seguridad del Congreso Nacional, a cargo del Presidente de la Cámara de Diputados, les impidió protestar con golpes, forcejeos y amenazas a los activistas.
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