Activistas de Greenpeace bloquean nuevamente a rompehielos de Shell en Suecia

Noticia - 3 mayo, 2012
Activistas de Greenpeace interceptaron y abordaron hoy en pleno mar abierto un navío rompehielos perteneciente a la empresa Shell, el Nordica, para continuar su protesta contra uno de los planes de perforación más destructivos de la región del Ártico.

Cerca de las 4:20 de la madrugada activistas de cinco países diferentes interceptaron al Nordica en aguas suecas, al sur de Öland, treparon al barco y se encerraron dentro de él para exigir que Shell abandone sus controvertidos proyectos de perforación en esta frágil región de la tierra. 

“Los audaces planes de Shell relativos a la extracción de petróleo en el Ártico suponen un riesgo inaceptable para este lugar, único en el mundo”, dijo la toxicóloga y activista de la Campaña Acción Nórdica de Greenpeace, Therese Jacobson. “Nos encontramos en una encrucijada. Debemos elegir proteger el Ártico, o permitir que las petroleras como Shell y otras voraces empresas destruyan esta preciosa región. La decisión es clara, tenemos que salvar el Ártico ".

 La acción de hoy fue precedida por una intervención similar ocurrida esta misma semana, cuando veinte activistas de la misma campaña abordaron el Nordica en Helsinski, Finlandia, mientras éste se preparaba para unirse a la flota que iría a trabajar en Alaska durante el verano próximo.

A pesar de que el primer grupo de activistas fue arrestado, veintidós activistas más llegaron al barco en dos botes inflables y tres canoas, y aún con una fuerte presencia de policías y guardias marítimos y de helicópteros rondando la zona, pudieron disponer las boyas frente al barco y comenzar a pintar “Stop Shell” (“Paren a Shell”) sobre uno de los costados del rompehielos antes de ser arrestados. El Nórdica, luego, partió a destino. 

El Nordica se dirige a Alaska para unirse a su embarcación hermana, el Fennica, junto a la que apoyará las naves Kulluk y Noble Discoverer, los dos barcos perforadores elegidos por Shell para explorar cinco pozos en los mares Beaufort y Chukchi, respectivamente, ambos ubicados en la costa norte de Alaska. 

Mientras el Ártico ya se encuentra bajo una inmensa presión debido al cambio climático y la contaminación, Shell es la primera multinacional petrolera en hacer de la extracción de petróleo en el lugar un verdadero objetivo corporativo. Si este verano finalmente el petróleo es hallado, otros gigantes globales copiarán la idea y las posibilidades de un catastrófico derrame de petróleo en el Ártico aumentarán dramáticamente.