Amazonas en peligro: El Senado de Brasil aprobó el nuevo Código Forestal

El veto de la presidenta Dilma Rousseff sería la última oportunidad para proteger las selvas

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Noticia - 7 diciembre, 2011
Brasil, 7 de diciembre de 2011 - Greenpeace condenó hoy que el Senado de Brasil haya aprobado anoche el nuevo Código Forestal para su país. La propuesta había sido presentada como una medida para la protección de las selvas, pero, después de muchas alteraciones, terminó convirtiéndose en una invitación a la deforestación.

Activistas de Greenpeace inflaron una motosierra en la Praça dos Três Poderes, en Brasília con un mensaje para que el senado pare la deforestación. © Greenpeace / Tico Fonseca - Iluminart

A pesar de múltiples retrasos y un esfuerzo de última hora por parte de científicos, ambientalistas y movimientos sociales para recuperar la cordura con enmiendas destinadas a hacer del código una medida eficaz para la protección de los bosques, el Senado, bajo la intensa presión del sector rural,  votó una ley que abre las puertas del Amazonas a las motosierras y a la destrucción generalizada.

Con 59 votos a favor y 8 en contra y el nuevo Código Forestal  reduce la protección de los bosques, amnistía a los que deforestaron y aumenta la destrucción (1).

"El texto aprobado es un desastre para el Amazonas y los bosques de Brasil. El nuevo Código invita al avance de la deforestación sobre la Amazonía,  que ya causado graves daños,  como por ejemplo en el estado de Mato Grosso. Con la promesa de amnistía, los grandes criminales de los bosques volverán a sus viejas costumbres y el Amazonas  estará, una vez más,  frente a la destrucción a gran escala ", declaró Paulo Adario, director de la campaña  de bosques de Greenpeace Brasil

Las discusiones sobre los cambios del Código Forestal han durado más de una década, incluyendo dos años de un desordenado proceso legislativo en el Congreso Nacional. Y, mientras que el proyecto estuvo en la Cámara de Representantes por un año y medio, el Senado sólo tuvo seis meses para presentar su informe final. Con tan poco tiempo, el debate fue limitado e incompleto, (los senadores no dieron la debida importancia a la contribución de la ciencia y la sociedad civil) y se precipitó a través de las cuatro comisiones.

Ahora, el resultado final amenaza con hacer retroceder varios años de lucha contra la deforestación.  La decisión estará ahora en manos de la Cámara de Diputados, donde el sector rural tiene aún mayor influencia.  En las próximas dos semanas, el cuerpo legislativo dará su voto y  la iniciativa pasará a sanción presidencial.

La presidenta Dilma Rousseff tendrá una oportunidad única y real para detener este Código Forestal  antes de que sea entregado en bandeja de plata al sector agroindustrial.

Gracias a la Ley Forestal vigente (2), y  a una red de áreas protegidas y tierras indígenas, Brasil ha logrado muchos avances significativos en la lucha contra la deforestación durante la última década. Sin embargo, ahora está dando marcha atrás después de ataques muy fuertes y organizados desde el sector del agro. Este poderoso grupo económico podría llegar a obligar al Congreso a desmantelar la legislación de protección del medio ambiente que representa  el Código Forestal.

 "El Fiscal Federal y los científicos ya declararon que esta ley no es buena para el medio ambiente y ahora tendrán el reto legal, dado que  se siguieron y acordaron todas las demandas hechas por el sector rural. Para evitar un desastre ambiental, la presidenta Dilma debe vetarla. Todavía queda tiempo ", agregó Adario. "De no hacerlo, seguramente deberá enfrentarse a la condena internacional y  a ser conocida como cómplice de los criminales que destruyen los bosques, en lugar de ser su protectora."

Brasil se comprometió a preservar la selva amazónica, por el bien de la biodiversidad, el clima y para las generaciones actuales y futuras. Si la presidencia sanciona esta nueva ley forestal también estará poniendo en peligro los acuerdos internacionales que firmó el ex presidente Lula en diciembre de 2009 en la Conferencia sobre el Clima de la ONU en Copenhague, comprometiendo a Brasil a cumplir con objetivos  muy ambiciosos de reducción de emisiones de CO2. Rousseff fue en la jefa de Gabinete de Lula en la Copenhague  y ayudó a sellar el acuerdo sobre esos compromisos. Ahora debe recordarlos ya que tendrá que rendir cuentas por sus acciones ante la comunidad mundial el próximo año, cuando sea la anfitriona de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo Sostenible en Río de Janeiro.

Este encuentro se realizará veinte años después de la histórica Cumbre de Río que catalizó la acción de la comunidad internacional a favor del medio ambiente y el desarrollo.

En Brasilia, activistas de Greenpeace inflaron una motosierra para reclamar al Senado que proteja los bosques. Mirá las fotos:



Notas:


1-    El proyecto plantea, entre otros puntos, que las áreas de selva protegidas en propiedades privadas en la región amazónica, equivalentes al 80%, se reduzcan a un 50%. También establece que las zonas protegidas a la vera de los ríos, que hoy suponen una franja de 30 metros a cada lado, pasen a ser de 15 metros y establece una amplia amnistía para los hacendados que, en las últimas décadas, violaron las leyes actuales, deforestando donde estaba prohibido y mantienen en esas zonas su actividad agropecuaria.

2-    La Ley Forestal , creada en 1965, establece el porcentaje de cobertura vegetal originaria que los propietarios rurales tienen que conservar en sus propiedades y llega a 80% en la Amazonía.

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Luciana María Aranda dice:

HOLA GENTE LINDA DE GREENPEACE: GRACIAS POR SUS GRAN LUCHA!!!
SEÑORA PRESIDENTA DILMA ROUSSEFF, POR ESTE MEDIO SOLO LE PIDO QUE SOSTE...

Publicado 9 diciembre, 2011 en 21:03 Reportar abusos Reply

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