Noticia - 6 septiembre, 2011
Buenos Aires, 6 de septiembre - La empresa Ricky Sarkany tomó la decisión de exigirles a sus proveedores de cueros que no contaminen la cuenca del Riachuelo. El acuerdo firmado con Greenpeace establece que las curtiembres deberán comprometerse, frente a la autoridad correspondiente, a implementar procesos de producción limpia hacia cero vertido antes del año 2020, y hacer pública la información sobre las sustancias peligrosas que vierten al ambiente. Se trata de un paso muy importante para la descontaminación y el saneamiento del Riachuelo.
Ricky Sarkany junto a Martín Prieto, Director Ejecutivo de Greenpeace Argentina.
A partir de hoy Sarkany, referente de la industria de la moda, pasará a asumir un papel clave en el proceso de descontaminación de las aguas del Riachuelo, ya que no comprará cuero en curtiembres que no hayan asumido el compromiso que plantea Greenepace. A la fecha ningún establecimiento lo ha adoptado, y ahora lo necesitan si o si para venderle sus materias primas a Sarkany y Grimoldi, empresa que también firmó el acuerdo.
"Es necesario tener un compromiso social y ecológico, por eso me comuniqué con el Director Ejecutivo de Greenpeace, Martín Prieto. Nuestra marca va a seguir haciendo productos de alta calidad, pero sabiendo que nuestro trabajo no va a redundar en arruinar el ambiente. Gracias a entidades como Greenpeace, los empresarios podemos ver que nuestra responsabilidad no finaliza en el producto terminado. Nuestro fin y el de Greenpeace es el mismo", expresó Ricky Sarkany.
“Celebramos el acuerdo; es muy importante que Sarkany, una vez que tomó conocimiento de la situación de las curtiembres, haya aceptado la responsabilidad en todas las etapas de producción de sus productos, y que implemente políticas ambientales para sus curtiembres proveedoras con el fin de eliminar los vertidos contaminantes. Esperamos que Sarkany al igual que Grimoldi, sean el ejemplo a seguir, y que esta iniciativa se replique en el resto del sector de la indumentaria y el calzado”, manifestó Consuelo Bilbao, Coordinadora de la Campaña Riachuelo.
La decisión se tomó a semanas de la denuncia de Greenpeace contra el sector de la indumentaria, fruto de una extensa y bien documentada investigación sobre la contaminación de las curtiembres en el Riachuelo, uno de los sectores de mayor impacto ambiental en la Cuenca. El informe “La contaminación viste a la moda”, da cuenta de la presencia de sustancias químicas peligrosas en las descargas de los establecimientos curtiembreros vinculados con importantes marcas de indumentaria (1).
Nota:
(1) Para leer el informe "La contaminación se viste a la moda", hacé click aquí
