Aunque hoy estamos tristes por lo que acontece en las Torres del Paine, y nos hubiera gustado cerrar el año sin este tipo de malas noticias, debemos mirar hacia atrás y ver todo lo que pudimos hacer en este 2011. Y sobre todo, lo que pudimos hacer gracias al apoyo de nuestros socios y ciberactivistas y adherentes.

Durante el año logramos grandes avances en nuestra campaña de Océanos, pavimentando el camino para que la próxima ley de pesca nos entregue un futuro sustentable y proteja los recursos marinos, la biodiversidad y la fuente de trabajo de cientos de miles de personas. El futuro de esas comunidades y de nuestro país depende de que se incluyan medidas que garanticen la sustentabilidad del mar.

También trabajamos en energía, y en nuestra campaña por una revolución en la forma de generarla, demostramos el compromiso e interés de Chile con su patrimonio, los recursos naturales y con el respeto a la vida, denunciando irregularidades y abusos cometidos por empresas. Salimos a las calles liderando las muestras de rechazo en Marzo, abriendo las puertas al que consideramos el año en que por fin pudimos discutir y proponer cómo girar nuestro futuro hacia el camino de las energías limpias.

 

Este ha sido un año que ha marcado el despertar de nuestra sociedad vinculando medio ambiente y justicia de forma masiva, hemos abierto los ojos para decir basta a los abusos de quienes pueden porque tienen.

Sabemos que todavía queda mucho camino por recorrer y mucho trabajo que hacer, pero también sentimos que debemos detenernos, reflexionar y agradecer.

A nuestros más de 6.500 socios, porque sin ellos, ni siquiera sería posible comprar un metro de lienzo para protestar. Mucho menos ejecutar acciones complejas como la de HidroAysén, producir multitudinarias marchas como la de Chile Limpio en marzo, o colaborar con organizaciones, parlamentarios y ciudadanos, por una gran propuesta energética para Chile.

A nuestros ciberactivistas, que ya suman más de 50.000 y con los cuales nuestras campañas y acciones toman fuerza y notoriedad. Son quienes amplifican el mensaje y nos permiten ser competitivos, en un sistema dominado por marcas, corporaciones y poder.

Y a todos los amigos que nos siguen en nuestras redes sociales. Más de 70.000 en Facebook y más de 20.000 en Twitter. Ya han dado un primer paso compartiendo y difundiendo nuestro trabajo.

Cualquiera sea el lugar que ocupes, e incluso si hoy estás en nuestro sitio por primera vez, ya estás más comprometido que ayer. Reflexiona. Sea cual sea tu grado de compromiso, siempre puedes dar un paso más.

Es así de simple. Greenpeace es una organización de personas, para las personas. Nada tendría sentido, si estuviésemos solos. Nuestro trabajo sería en vano, si no logramos que cada vez más personas se unan a la causa.

 

Comparte lo que estás leyendo hoy, y que nuestro planeta forme parte de tus buenos deseos esta noche.

¡Felices Fiestas!