En Greenpeace estamos comprometidos con la protección del medio ambiente, la biodiversidad y el uso sustentable de los recursos. Es por esto que durante este último tiempo nuestros esfuerzos han estado destinados a detener el proyecto Hidroaysén y sus nefastas consecuencias sobre la Patagonia.

Sin embargo, no sólo hemos estado trabajando para frenar la construcción de las mega-represas en el sur de Chile. Durante mucho tiempo la campaña de océanos en Chile ha ido realizando una extensa labor para la conservación y el uso sustentable de los recursos marinos en nuestro país y alrededor del mundo.

Conocidas  son nuestras acciones para detener la caza ballenera a nivel mundial. Este esfuerzo se vio coronado en el trabajo de la campaña en nuestro país cuando en el año 2008 logramos la proclamación del un Santuario Ballenero en Aguas Nacionales. Luego de esta victoria lograda junto al apoyo fundamental de nuestros socios, que participaron en las actividades que realizamos, la campaña comenzó su trabajo para evitar la destrucción de nuestros recursos marinos en manos de la depredadora pesquería industrial.

¡Victoria!

Celebrando junto a nuestros socios y voluntarios la creación del santuario ballenero en aguas nacionales.



En 2009, para dar inicio a nuestra campaña de conservación de nuestros océanos, hicimos acciones en Talcahuano para denunciar los impactos de la Pesca de Arrastre. Con esto logramos  transparentar los impactos de la pesca de arrastre e iniciamos el debate sobre la necesidad de conservar nuestros ecosistemas. Gracias a nuestras acciones, hoy se están discutiendo en el congreso dos proyectos de ley para evitar el descarte de especies y mejorar la observación científica en la flota nacional.

En 2010, fuimos los precursores en presionar al gobierno para la creación de una red de parques marinos que abarquen al menos el 10% de cada eco-región de nuestro mar. En las celebraciones del Bicentenario, en plena Revista Naval, realizamos una acción frente al buque escuela Esmeralda desplegando un lienzo con el mensaje “Parques Marinos Ahora” para solicitar al presidente Sebastián Piñera, ahí presente, un compromiso real con la protección de los océanos.


 

Este año en Greenpeace realizamos un estudio que da cuenta de la crisis social que enfrentan los pescadores artesanales del puerto de San Antonio, el cual hemos entregado a senadores y diputados. Este documento explica cómo la escasez de recursos pesqueros, provocada por la extracción destructiva por parte de la flota industrial a través de la pesca de arrastre, ha dejado a los pescadores artesanales sin el sustento para vivir. Ellos ya no encuentran qué pescar, y este drama también se vive en miles de familias a lo largo de Chile que durante generaciones han vivido de la pesca de una forma sustentable y que hoy están condenadas a la pobreza.



Paralelamente hemos coordinado nuestros esfuerzos con los de las demás oficinas de Greenpeace alrededor del mundo, para participar de las instancias políticas internacionales donde se determinara el futuro de los recursos marinos del Pacifico Sur y de la Antártica.

Esta semana, cuando la mirada de la sociedad está pendiente de las manifestaciones contra la aprobación del proyecto Hidroaysén, hemos seguido nuestra labor por la defensa de nuestros océanos. Fuimos hasta el Congreso Nacional a exigir al Ministro de Economía, Juan Andrés Fontaine y al Subsecretario de Pesca, Pablo Galilea, que den a conocer de forma transparente en la Cámara de Diputados, a la ciudadanía y organizaciones civiles, los principales aspectos del proyecto del nuevo régimen de pesca que debería ingresar a trámite legislativo en las semanas próximas. Ninguno de ellos se presentó a la cita, pero seguiremos trabajando.

Te necesitamos. Actualmente en Chile el 60% de los recursos que le pertenecen a todos se encuentran con problemas de conservación y el 40% de las pesquerías sobre-explotadas.

Debemos seguir luchando por la defensa de nuestros océanos, para detener los impactos de la pesca de arrastre, conseguir una red de parques marinos que cubra al menos al 10% de cada eco-región de nuestro mar, y asegurarnos que nuestras autoridades apliquen criterios de sustentabilidad e incorporen la opinión científica al momento de regular las cuotas de pesca y no sólo sea una negociación a puertas cerradas y basada en políticas de corto plazo.

¡Aún queda mucho por hacer y con tu apoyo podremos seguir adelante!