Tripulantes del barco Esperanza de Greenpeace en  zodiac  inspeccionando una zona de la Antártida

Los negacionistas, esas personas que se entretienen cada día negando las evidencias científicas y los impactos que el cambio climático está ocasionando en el planeta en lugar de actuar, se han quedado sin uno de sus argumentos preferidos, ese que dice “¿cómo va a haber cambio climático si está aumentando el hielo en la Antártida?”. La ciencia, una vez más, ha venido a “descongelar” la confusión.

Científicos del Instituto de Tecnología de Georgia han determinado que el calentamiento de la atmósfera, el mismo que causa el deshielo en el Polo Norte, está provocando que el ciclo de precipitaciones se acelere, por lo que ahora nieva más en el confín sur del planeta, la Antártida.

Esa mayor cantidad de nieve, aísla la capa superior de las zonas congeladas de la Antártida y la protege. El segundo efecto beneficioso de esta nieve es que refleja los rayos de sol, lo que también contribuye a que se preserven las bajas temperaturas.

Pero no nos podemos dejar engañar por este espejismo: el calentamiento global producido por el aumento de gases de efecto invernadero en la atmósfera ya está acelerando el deshielo de los glaciares en el Ártico y según predicen los científicos, ese mismo calentamiento transformará las nevadas en lluvias que, a su vez, aumentarán el deshielo en la Antártida.

Aclarado el misterio del aumento del hielo en la Antártida, no nos queda otra que actuar. El cambio climático es incuestionable y es urgente detenerlo. En Greenpeace apostamos por una revolución energética 100% renovable, ¿por qué apuestas tú?

Campaña de cambio climáatico, Greenpeace