Comunicado de prensa - diciembre 7, 2004
Coincidiendo con la inauguración de la décima Conferencia de las Partes de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático, Greenpeace ha instalado una simbólica arca de Noé en el céntrico obelisco de Buenos Aires al que han accedido cientos de "refugiados por el cambio climático" para pedir que se tomen medidas urgentes.
En coincidencia con la apertura en Buenos Aires de la decima reunión de las partes de la convención de cambió climático, Greenpeace reclamó a los gobiernos del mundo la adopción de medidas urgentes para frenar el cambio climático con la instalación de un arca gigante en el obelisco de Buenos Aires
El gigantesco símbolo usado por Greenpeace quiere llamar la
atención de los delegados de los Gobiernos de todo el mundo que
participan en Buenos Aires en la Cumbre de Cambio Climático sobre
la necesidad de tomar inmediatamente medidas para paliar el cambio
climático. Bajo el lema "Millones en Riesgo", mujeres y hombres de
todas las edades caracterizados como "refugiados ambientales" se
subieron al arca para simbolizar el terrible destino que pesa sobre
la humanidad.
"El Cambio Climático ya está aquí y está afectando con más
severidad a las naciones más pobres, donde la gente es más
vulnerable", ha afirmado Raquel Montón, responsable de la campaña
de cambio climático de Greenpeace. "Las negociaciones
gubernamentales deben tener en cuenta a los millones de personas
que lo perderán todo por los desastres que el calentamiento global
provocará en los próximos años", ha agregado Montón.
La reunión de Buenos Aires, la décima reunión de las partes de
la Convención sobre Cambio Climático (COP10), es la primera tras la
ratificación del Protocolo de Kioto por parte de Rusia que asegura
la entrada en vigor de este instrumento que establece los primeros
límites a las emisiones de gases que afectan el clima. El Protocolo
de Kioto será ley internacional el 16 de febrero de 2005, con siete
años de retraso.
"Si ahora no hacemos un esfuerzo para reducir las emisiones lo
antes posible, los impactos serán mucho peores en las próximas
décadas y no habrá arca lo suficientemente grande para los
refugiados por el Cambio Climático", ha afirmado Raquel Montón. "La
prioridad es mantener el aumento de la temperatura global por
debajo de los 2 grados centígrados respecto de los niveles
pre-industriales y esto significa realizar una reducción rápida y a
gran escala de las emisiones desde ahora hasta mitad de este
siglo", añadió.
Greenpeace demanda a los participantes de la COP10 a que tomen
en serio su responsabilidad y emprendan un camino que conduzca a
reducir las emisiones para proteger el clima y a millones de
personas de todo el mundo. "Para que este esfuerzo tenga éxito
debemos lograr que Estados Unidos abandone su intransigencia y su
negativa a ratificar el Protocolo de Kioto lo antes posible",
puntualizó Montón. "Todos los países tienen que hacer frente al
desafío necesario que pasa tanto por cambiar el modelo energético y
sustituir los combustible fósiles por energías renovables como por
fomentar el ahorro y la eficiencia energética. España tiene dos
importantes retos. Uno inmediato, con el cumplimento de Kioto, y
otro a largo plazo, ya que las decisiones que ahora se tomen en
política energética determinarán nuestro futuro económico y
ambiental", concluyó.
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