Este 21 de noviembre montaremos en la Isleta de la primera sección de Chapultepec, en colaboración con Taller 13, una maqueta topográfica que representa la Cuenca del Valle de México. La idea es formarla con botellas de vidrio que contienen agua e historias de diversos ríos y cuerpos de agua de la cuenca y que representan el agua que tenemos, la forma en que la usamos y la manejamos, y la situación que enfrentamos en la ciudad y su zona conurbada, como resultado de ello.

Hemos colectado el agua en pequeñas botellas, visitando y conociendo, con vecinos y amigos, ríos, canales y cuerpos de agua que son indispensables para la calidad de vida de todos nosotros en esta mega urbe. Hemos compartido grandes experiencias en sitios como Canal Nacional; el río Santo Desierto, en el Desierto de los Leones; al río Magdalena en la zona boscosa conocida como Los Dinamos, y su tramo más contaminado en las cercanías de los Viveros de Coyoacán; a los canales de Xochimilco; al río Viborillas en los bosques de Santo Tomás Ajusco. Lugares que nos hablan de cómo nos relacionamos con el agua, cómo la aprovechamos, la desperdiciamos, la cuidamos o le damos la espalda como hacemos con nuestros ríos, a los cuales hemos convetido en drenajes y ocultado bajo metros de asfalto para dar espacio a millones de automóviles.

Uno de esos grandiosos lugares fue el de nuestros amigos del Predio El Molino, en la Delegación Iztapalapa.  Se preguntarán por qué se nos ocurrió hacer una de estas tomas de agua justo ahí, en una delegación que es tan conocida por tener graves problemas de acceso al agua, donde hay una considerable cantidad de pozos de extracción para el beneficio de todos los que vivimos en la ciudad, pero son precisamente los que viven ahí quienes sufren por la escasez del agua, su mala calidad, hundimientos y fracturas en sus casas por la sobre explotación.

 

Y ahí es donde empieza esta gran historia de valentía y transformación de la ciudad, porque justo en ese lugar, un grupo de ciudadanos visionarios, que han desarrollado una fuerte capacidad de organizarse juntos para construir y hacer realidad sus sueños, han creado lo que ellos llaman una propuesta distinta de cómo vivir en la ciudad. Una forma que demanda cada vez menos recursos externos, donde se reduce, se reusa y se reciclan los residuos, por más pequeños que sean, un lugar donde cultivan sus propios alimentos y se elaboran medicinas caseras con lo cultivado, cultivos que se nutren sólo con los diferentes tipos de composta que se hacen ahí mismo, donde se cocina con el sol y se captura agua de lluvia para regar, y donde se comparte el conocimiento y la emoción de hacer todo esto, porque esa alegría de que es posible vivir de otra forma, una más sana, se contagia y nos lleva a eso que por ahí llaman: sustentabilidad.

 

De esta agua de lluvia enriquecida por patos y peces, que riega zanahorias, betabeles, acelgas, romero y mucho más, colectamos un poquito de El Molino para sumarla al agua que dará forma a la cuenca que resplandecerá con luces en Chapultepec este noviembre. Esperamos que puedan venir y acompañarnos ese día, para conocer a todos estos amigos, para disfrutar de un espectáculo de luz que nos hará re-conectarnos con el agua y esperamos también, unirnos y activarnos para manejar este líquido vital de una manera distinta. ¡Únete a la #OperaciónCiudad!