¿Sabías que cada gerente de ZARA envía un informe diario a la oficina central para reportar lo que ha sucedido en su tienda? Según los periodistas económicos, esto ayuda a la cadena de moda a reaccionar ante las tendencias de cada lugar y a identificar oportunidades con una velocidad pasmosa.

Sin embargo, han pasado tres días desde que lanzamos nuestra campaña pidiendo a Zara que deje de usar tóxicos para fabricar sus prendas,y la compañía todavía no se ha decidido a aceptar nuestro desafío Detox.

Esta misma semana, activistas de lugares tan dispares como Hong Kong, Budapest, Ginebra, Hamburgo y Madrid, han hecho una vista a ZARA para dejar un mensaje que seguro que no ha pasado desapercibido en los informes que los gerentes enviaron a la sede esos días. Estas son tan sólo algunas fotos de las acciones que Greenpeace realizó en diferentes tiendas de ZARA y que se están compartiendo masivamente a través de Twitter, Facebook, Instagram, y principal plataforma social de China, Weibo.

Activistas disfrazados de maniquíes sostieniendo pancartas con el mensaje "No More Fashion Victims" delante de una de las principales tiendas de ZARA en Madrid.
Activistas disfrazados de maniquíes sostieniendo pancartas con el mensaje "No More Fashion Victims" delante de una de las principales tiendas de ZARA en Madrid.

Greenpeace activists unfurl a banner reading in Spanish: 'Zara, Join Toxic Free Fashion' in front of one of the main Zara stores in Madrid.
Activistas de Greenpeace despliegan una pancarta con el mensaje "ZARA, únete a la moda libre de tóxicos" delante de una de las principales tiendas de ZARA en Madrid.

Escaladores de Greenpeace cuelgan una pancarta enorme con el lema "ZARA únete al reto Detox" en frente de una tienda ZARA en Ginebra.
Escaladores de Greenpeace cuelgan una pancarta enorme con el lema "ZARA únete al reto Detox" en frente de una tienda ZARA en Ginebra.

Tres activistas de Greenpeace se camuflan para intentar hacerse "invisibles" en una ventana de la tienda ZARA en el centro de Hong Kong y despliegan una pancarta en la que se lee: '"Fashion victim Invisible".
Tres activistas de Greenpeace se camuflan para intentar hacerse "invisibles" en una ventana de la tienda ZARA en el centro de Hong Kong y despliegan una pancarta en la que se lee: '"Fashion victim Invisible".

Escaladores cuelgan una pancarta enorme en frente de una tienda ZARA en Hamburgo donde se pregunta a los transeúntes: "¿Cónoces el sucio secreto de ZARA?

Escaladores cuelgan una pancarta enorme en frente de una tienda ZARA en Hamburgo donde se pregunta a los transeúntes: "¿Cónoces el sucio secreto de ZARA?

Activistas de Greenpeace se visten con ropa protectora y máscaras frente a una tienda ZARA en el centro de Budapest.
Activistas de Greenpeace se visten con ropa protectora y máscaras frente a una tienda ZARA en el centro de Budapest.

Todo comenzó el pasado martes en nuestra Conferencia de Beijing, donde presentamos el último informe de Greenpeace, Hilos toxicos: los grandes parches de la moda, que revela que varias prendas de vestir procedentes de 20 marcas de moda muy conocidas dieron positivo en sustancias químicas peligrosas después de ser analizadas.

No fue la típica conferencia de prensa. El evento comenzó con un desfile de tóxicos en el que los modelos mostraron cómo las grandes marcas como Zara nos están convirtiendo a todos en víctimas de la moda, obligándonos a comprar ropa que contribuye fatalmente a la contaminación del agua. Esto ocurre porque los proveedores de la marca están usando productos químicos muy peligrosos en su proceso de producción. Es decir, que los ríos de los países donde se fabrica la ropa, están siendo contaminados directamente. Pero la historia no acaba aquí, ya que los ríos del resto del mundo también se está contaminando con los residuos químicos que se quedan en la ropa y se liberan cuando estas prendas se lavan.

¿Qué podemos hacer ante esta situación?

Para empezar, puedes unirte a nuestra campaña y firmar para conseguir que ZARA elimine los tóxicos de su producción. ¡Ya somos más de 260.000! Y esto es sólo el principio.

Si ya lo has hecho, ayúdanos a seguir presionando a ZARA a través de las redes sociales. Hemos rastreados miles de tweets, mensajes de Facebook y un sinfín de quejas en la web, que los clientes afectados, activistas, e incluso los amantes de la moda, han dejado pidiendo a ZARA que se una a nuestro reto Detox. Todavía puedes acceder a la página de Facebook de ZARA o mandarles un mensaje a través de Twitter para preguntar a la marca que por qué no se da prisa en limpiar su cadena de suministro.

Lleva el mensaje Detox a las tiendas

Tenemos una propuesta para los más aventureros. Este fin de semana es tu oportunidad para hacer llegar un mensaje personal al gerente de la tienda. Los informes diarios de los gerentes, que son uno de los secretos del éxito de la multinacional, son también una oportunidad de oro para hacer llegar directamente nuestro mensaje a los jefes de la empresa.

Check-in

¿Cómo hacerlo?

- Encuentra tu tienda ZARA más cercana (prueba con el propio localizador de tiendas que ZARA tiene en su web.

 -Publicar en Twitter o Facebook tus intenciones de ir. Quien sabe, igual algún amigo se una a ti.

-Acude a la tienda y pregunta a cualquier chico o chica de mostrador que si puedes hablar con el gerente. Si te preguntan de qué se trata, no lo escondas: cuéntale que vas a hablarle de los productos químicos que Greenpeace ha encontrado en la ropa de ZARA. 

-Si usas los geolocalizadores, no te olvides de postear en Facebook o Foursquare el registro de entrada a la tienda y escribir "Detox ZARA".

 -Si consigues hablar con el gerente, hazle dos preguntas:

    1. ¿Tiene ZARA ropa fabricada sin productos químicos peligrosos o que no cause contaminación tóxica?

    Y ... ..

    2. ¿Podría usted como gerente preguntarle a la central en su informe que cuándo tiene ZARA intención de comprometerse realmente con la desintoxicación de su cadena de produción?

No es tan difícil, ¿Verdad? Si consigues tu cometido, no te olvides de contarnos tu experiencia dejando un comentario en la web, por Twitter o por Facebook. ¡Mucho ánimo!

Traducción: María Eugenia Redondo