Noticia - 25 agosto, 2009
Después de que se publicara la Ley para el Aprovechamiento Sustentable de la Energía, en noviembre del año pasado, se creó la necesidad de hacer un reglamento que garantizara el uso eficiente de la energía que se consume en el país; sin embargo, el anteproyecto, que ya aprobó la Comisión Federal de Mejora Regulatoria (Cofemer), es insuficiente y poco claro
En la parte externa de una tienda de autoservicio, activistas de Greenpeace muestran el lote de focos que sacaron del mercado debido a su ineficacia y contribución al cambio climático
Activistas de la organización fueron a exigirle al Ejecutivo que comience el cambio desde casa cambiando los focos incadescentes de Palacio Nacional por ahorradores
Al hacer un análisis del reglamento, Greenpeace concluye que la Cofemer está aprobando un instrumento jurídico que no sienta las bases para que se establezcan mecanismos que propicien el uso óptimo de la energía en todos los procesos y actividades, desde la explotación hasta el consumo y propiciar que los productos poco eficientes dejen de fabricarse y consumirse en todo el país.
El reglamento no obliga a la industria a fabricar y vender en México sólo productos que sean eficientes en su consumo energético, sólo se remite a solicitar a las empresas que hagan públicos sus consumos de enegía, y sólo sanciona la falta de información.
Muchos de estos productos, por ser nuevos y en un principio más caros que los no eficientes, no tienen mercados lo suficientemente amplios y esto es un límite para que sean adoptados por los usuarios de energía en función de decisiones de eficiencia y ahorro económico.
Es necesario que antes de la publicación definitiva del Reglamento en el Diario Oficial de la Federación, la Secretaría de Energía incorpore mecanismos como incentivos fiscales o financiamientos, para que tanto productores como usuarios finales, prefieran usar productos y servicios que brinden eficiencia económica y energética.
Además es importante que el objetivo del reglamento sea más ambicioso y vaya más allá de los simples certificados de persona o empresa eficiente, y cuyo carácter es voluntario.
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