Pemex: no basta limpiar por encimita para sanear un derrame

Boletín de prensa - 20 enero, 2012
Para determinar el grado de contaminación del río Coatzacoalcos es necesario tomar muestras en tierra, agua y sedimentos: Greenpeace. Prematuro que la paraestatal, Semarnat y Profepa den por terminada la limpieza de crudo en el río, sin analizar los impactos al medio ambiente

México, DF.- Sólo con estudios de agua, suelo y de impactos al medio ambiente, y no con declaraciones apresuradas, será posible determinar al grado de contaminación a lo largo de 12 kilómetros del río Coatzacoalcos, producto de un derrame de crudo de Petróleos Mexicanos (Pemex) en Cosoleacaque, Veracruz, señalo Greenpeace.

A tres semanas de ocurrido el vertido cerca del centro de válvulas de Pemex, en el predio El Polvorín; la paraestatal, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) así como la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) se apresuraron a asegurar que está limpio casi en su totalidad el crudo derramado en suelos y en el río, cuando retirar el hidrocarburo es sólo una parte del proceso.

“Pemex debe realizar estudios de caracterización, es decir: muestreos en agua y suelos, para evaluar el grado de contaminación del río Coatzacoalcos, ya que los impactos ambientales en este afluente por el derrame del pasado 31 de diciembre, podrían tardar años en desaparecer”, comentó Beatriz Olivera, coordinadora de la campaña de energía y cambio climático de Greenpeace.

Los muestreos de hidrocarburos en agua y suelos (caracterización), permiten conocer  si se han rebasado los límites máximos permitidos de hidrocarburos. Posteriormente se debe realizar el proceso de remediación o restauración del sitio, para asegurar la calidad de vida de la biodiversidad en el ecosistema.

Los impactos de un derrame de crudo tienen un efecto que puede durar décadas, aquí algunos ejemplos:

  • Un año después del derrame del Prestige, en España, en 2002, la degradación del hidrocarburo fue muy baja, propiciando la contaminación de las costas (1).
  • Después de 10 años de la tragedia del Exxon Valdez, se demostró que los peces y mejillones que se distribuían cerca de donde ocurrió el derrame todavía estaban expuestos a hidrocarburos residuales en el ambiente (2).
  • En el Golfo de México, a más de un año del derrame ocasionado por la British Petroleum, 80 por ciento del crudo aún no ha sido recuperado (3).

El Instituto Nacional de Ecología (INE) rememora algunos de los percances más grandes de la historia ligados a Pemex (4):

  • Fuga de fosgeno, en Poza Rica, Veracruz, 1950;
  • Derrame del Pozo Ixtoc I, en la Sonda de Campeche, 1979;
  • Explosión de gas propano, en San Juan Ixhuatepec, estado de México, 1984;
  • Explosión  en el drenaje de Guadalajara, Jalisco, 1992;
  • Explosión con etano plus en el complejo procesador de gas en Reforma, Chiapas,  1996;
  • Incendio de la terminal de Pemex, Satélite Norte, en San Juan Ixhuatepec, 1996.

Las emergencias ambientales relacionadas con Pemex continúan repitiéndose, creciendo en magnitud, aumentando su frecuencia y afectando al medio ambiente y a las personas. La Comisión Nacional de Hidrocarburos muestra que los derrames de Pemex han sido continuos tanto en mar como en tierra (6). Tan sólo de octubre a enero se han registrado cinco derrames en de Pemex en la zona del Golfo de México:

  • Derrame en el río Cazones (30 de octubre de 2011)
  • Derrame Poza Rica, Veracruz  (23 de noviembre de 2011)
  • Derrame Coatzacoalcos (31 de diciembre de 2011)
  • Derrame Álamo (10 de enero de 2012)
  • Incendio en plataforma KU-S campo  petrolero Ku Maloob Zaap, Campeche  (16 de enero de 2012) (5)

Pemex debe hacerse responsable por los graves impactos ambientales, económicos y sociales que está dejando su actividad en el Golfo de México. No puede seguir actuando impunemente sin que se haga responsable de sus acciones.

“Es urgente que el gobierno analice el alto riesgo que representan los proyectos de explotación petrolera en aguas profundas. Lo que hemos visto en el Coatzacoalcos es una muestra de que la industria petrolera en el país no está preparada para prevenir, actuar y remediar desastres ambientales. Greenpeace demanda la cancelación inmediata de nuevas perforaciones en el Golfo de México e indemnización a los pescadores que resultaron afectados”, finalizó Olivera.

Notas:

1. Laffon B., Rabade T., Pasaro E., Mendez J. Monitoring of the impact of Prestige oil spill on Mytilus galloprovincialis from Galician coast (2006) Environment International, 32 (3), pp. 342-348.
2.Jewett S.C., Dean T.A., Woodin B.R., Hoberg M.K., Stegeman J.J. Exposure to hydrocarbons 10 years after the Exxon Valdez oil spill: Evidence from cytochrome P4501A expression and biliary FACs in nearshore demersal fishes (2002) Marine Environmental Research, 54 (1), pp. 21-48.
3.El informe “Deepwater Horizon – Un año después” se puede descargar en http://www.greenpeace.org/espana/es/reports/Vertido-de-petroleo-en-el-Golfo-de-Mexico/
4. Sarmiento, María del Rocío. “Emergencias nacionales asociadas con sustancias químicas en México”. Disponible en:  http://www2.ine.gob.mx/publicaciones/gacetas/381/sarmiento.html
5. Arde plataforma de Pemex; evacuan al personal. Ciudad del Carmen, Campeche | Martes 17 de enero de 2012 Francisco Ynurreta / corresponsal | El Universal,18:35. http://www.eluniversal.com.mx/notas/823308.html
6. Comisión Nacional de Hidrocarburos. Reporte derrames y fugas 2010. http://www.cnh.gob.mx/_docs/ReporteCrudoFugas/REPORTE_DERRAMES_Y_FUGAS_OCT.pdf

Para mayor información, comunicarse con Raúl Estrada, en los teléfonos 56 87 95 95 ext.120 y 044 55 4084 5326 y el correo y  en la página www.greenpeace.org.mx