Noticia - 26 febrero, 2016
México- de febrero de 2016- En México el líder indígena y activista ambiental Ildefonso Zamora, fue encarcelado injustamente por proteger los bosques de locales de taladores clandestinos. Ildefonso, padece diabetes y problemas de salud en prisión. Greenpeace realiza una campaña para pedir a las autoridades mexicanas por su libertad y para que se reconozca su labor de defensa de los bosques.
El líder indígena y activista ambiental Ildefonso Zamora fue encarcelado injustamente por proteger los bosques.
El caso de Don Ildefonso Zamora es un ejemplo más de la criminalización de los activistas ambientales y defensores de derechos humanos quienes no solo hacen frente al crimen organizado sino también a los aparatos del Estado que son utilizados para reprimir sus labores. Es por eso que el Centro Derechos Humanos Miguel Agustín Pro (la ONG de derechos humanos más importante de México) y Greenpeace México lanzaron una campaña para pedir por su libertad y garantizar sus derechos humanos.
Durante 18 años Zamora denunció las actividades de tala ilegal que asolan su comunidad y están acabando con el Gran Bosque de Agua, abastecedor indispensable de la Ciudad de México. El 20 de noviembre de 2015 Zamora fue detenido arbitrariamente sin una orden de aprehensión por una acusación fabricada por el Ministerio Público de Tenancingo sin que ninguna autoridad le notificara que había una averiguación en su contra. Debido a esas y otras irregularidades Ildefonso no tuvo oportunidad de demostrar su inocencia.
“Se lo acusó de un supuesto robo ocurrido mientras él se encontraba en otro lugar el día en que se señalan los hechos con testimonios y pruebas que lo acreditan, por lo cual resulta imposible Ildefonso haya cometido el delito”, aseguraron las y los representantes del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro (Centro Prodh) y Greenpeace México.
Esta no es la primera vez que es perseguido por defender los bosques. En 2007 le costó la vida de su hijo Aldo Zamora, asesinado por taladores ilegales, y la detención arbitraria en 2015 de su hijo Misael por parte de militares. Los autores materiales de la muerte de Aldo continúan en libertad pese a que están plenamente identificados y existen órdenes de aprehensión en su contra. A esa impunidad se suma la injusticia de encarcelar a un hombre que junto con su comunidad protegió los bosques de San Juan Atzingo desde 1998.
Se calcula que en México ya fueron asesinados treinta inspectores forestales por cuestiones relacionadas con su trabajo y un número mucho mayor ha sufrido golpes y amenazas desde 1991. Los defensores del medio ambiente son perseguidos por empresas trasnacionales y deforestadores con la complicidad del gobierno local.
Recientemente, el Centro Prodh y Greenpeace México presentaron el caso de Ildefonso a las Relatorías de los Pueblos Indígenas, del Medio Ambiente y de Personas Defensoras de Naciones Unidas (ONU) y, se espera que en breve manden una comunicación al Estado mexicano.
Mientras tanto, más de 11 mil de personas ya se sumaron a la campaña para reclamar al Gobernador Eruviel Ávila, al Procurador General de Justicia estatal, Alejandro Gómez Sánchez que desistan de los falsos cargos fabricados contra Ildefonso y al Presidente del Tribunal Superior de Justicia estatal, Sergio Medina Peñaloza para que garantice sus derechos humanos.
Vos también podés pedir por la libertad de Ildefonso enviando un correo electrónico a las autoridades del Estado de México. Hacé click aquí.
