Algodón transgénico “Bt” resistente a plagas afecta al ambiente

Noticia - 3 junio, 2002
Informe científico documenta Super Plagas: Estudio realizado en China sobre el algodón transgénico Bt confirma impactos ambientales adversos y la necesidad de un marco regulatorio internacional para definir las responsabilidades sobre estos hechos

Un estudio realizado en China sobre el algodón transgénico “Bt” (Bacillus thuringiensis), el mismo que se siembra en el norte argentino, confirma impactos ambientales adversos a sólo cinco años de la existencia de plantaciones comerciales de este cultivo, y concluye que la variedad no podrá controlar las plagas eficazmente al cabo de 8/10 años de producción continua.

Los tests y el monitoreo de campos conducidos por cuatro institutos científicos dependientes del estado chino (2) ya han comprobado la resistencia a la bacteria Bt en la “plaga objetivo” (el barrenador del tallo), una reducción en la cantidad de los parásitos enemigos naturales del barrenador, y un incremento en la existencia de plagas secundarias. Estos factores han obligado a los agricultores a continuar usando pesticidas químicos y han incrementado la posibilidad de apariciones de brotes de ciertas plagas a causa del desequilibrio producido en la comunidad de insectos.

El autor del estudio, un investigador del Instituto de Ciencias Ambientales de Nanjing, y un asesor de Greenpeace, Profesor Xue Dayuan, dijeron: " El reporte confirma que el algodón Bt está siendo liberado al ambiente en forma prematura. Luego de cinco años de su comercialización, los agricultores y científicos chinos están enfrentándose con problemas serios y ven que es demasiado poco lo que se conoce sobre la interacción de los cultivos transgénicos con el ambiente. Las grandes esperanzas se han ido desvaneciendo y la realidad muestra que la información que ha brindado la industria de la Ingeniería Genética ha sido claramente infundada".

El algodón Bt –una variedad modificada genéticamente a la que se le insertó el gen de una bacteria del suelo que produce una toxina que mata cierto tipo de plagas– ha sido introducido a China por Monsanto en 1997.

En esa época, se lo publicitó como una solución mágica al problema de las plagas en ese país. Inmediatamente, el área de cultivo de esta variedad se incrementó en un millón y medio de hectáreas en 2001, ascendiendo al 35% del total del área algodonera: el algodón Bt de Monsanto alcanza las dos terceras partes de todo el algodón transgénico sembrado en China.

A diferencia de China, en la Argentina el algodón Bt está presente en una mínima proporción: sólo un cinco por ciento del área total algodonera está sembrada con esta variedad transgénica, debido a su alto precio con relación a las variedades convencionales. El algodón genéticamente modificado de Monsanto se encuentra presente en la mayoría de las provincias algodoneras, como Chaco, Santiago del Estero o Formosa.

Esta variedad transgénca resistente a plagas fue patentada en la Argentina por Genética Mandiyú, una subsidiaria de Monsanto.

SUPER PLAGAS Y MÁS PROBLEMAS

Según el "Resumen de las investigaciones sobre los impactos ambientales del algodón Bt en China", las pruebas demostraron que la susceptibilidad de los barrenadores resistentes a la toxina Bt bajó a un 30% luego una alimentación continua con hojas del algodón Bt durante 17 generaciones. La resistencia aumentó unas mil veces cuando la alimentación continuó hasta la 40º generación.

Por otra parte, la población de parásitos enemigos naturales del barrenador se redujo significativamente en los campos de algodón Bt. Plagas secundarias como el algodón alphids, algodón ácaro rojo, trips y otros, reemplazaron al barrenador como plaga primaria en algunos campos. Además, se concluyó que la resistencia del algodón Bt al barrenador del tallo disminuye con el paso del tiempo.

"Con este transgénico, los agricultores se están encontrando, ellos mismos, enredados con súper insectos Bt-resistentes, plagas secundarias emergentes, reducción en la cantidad de enemigos naturales, desequilibrio en la ecología de los insectos, y la necesidad de continuar rociando los cultivos con pesticidas químicos para tratar de controlar lo incontrolable”, señaló Lo Sze Ping, especialista en transgénicos de Greenpeace China. Y se preguntó: “¿Qué hará Monsanto para solucionar este problema originado por su falta de precaución?”.

“El gobierno Chino tiene un rol específico en ayudar a que la comunidad internacional se asegure que corporaciones como Monsanto queden obligadas a cubrir los daños que están siendo causados por el desarrollo y la liberación de cultivos transgénicos al ambiente", agregó.

(1) El estudio, en inglés, se encuentra disponible en el sitio web de Greenpeace Internacional: http://www.greenpeace.org/%7Egeneng/reports/env_impact_eng.pdf

(2) El informe revisó los datos producidos por cuatro institutos estatales: Instituto de protección de plantas, Academia de Ciencia de la Agricultura de China (CAAS); Instituto de investigación del algodón de CAAS; Departamento de Protección de Plantas, Universidad de Agricultura de China; y el Departamento de protección de plantas, Universidad de Agricultura de Nanjing.