Amenaza de muerte contra Greenpeace por denunciar la destrucción de la Selva Amazónica.

Noticia - 10 octubre, 2001
Las amenazas de muerte a un miembro de Greenpeace en la Amazonía brasileña no detendrán la Campaña de Greenpeace para proteger la selva tropical amazónica

Amenaza de muerte contra Greenpeace por denunciar la destrucción de la Selva Amazónica

Greenpeace quiere hacer público que las recientes amenazas de muerte a uno de sus miembros no detendrán a esta organización ecologista en su lucha contra la destrucción de la Amazonia.

La pasada semana el coordinador de la Campaña Amazónica de Greenpeace, Paulo Adario, recibió en su domicilio de Manaos, en el Estado de Amazonas, una llamada telefónica amenazándolo de muerte. "Esto no es solamente una seria y grave amenaza contra mi vida. Supone una amenaza contra toda la gente que trabaja para proteger la Amazonia”, ha declarado Paulo Adario en una rueda de prensa en Brasilia.

"Está claro que nuestro trabajo de denuncia de la explotación ilegal de caoba en la Amazonía está en el origen de esta amenaza de muerte. En Brasil, es de todos conocido que la mayoría del comercio de caoba está controlada por criminales a quienes les ha sido permitido operar con total impunidad”.

El pasado 26 de septiembre, Greenpeace presentó evidencias claras de la explotación ilegal en el corazón de la Amazonía brasileña. Fotografías e imágenes de video de un reconocimiento aéreo de Greenpeace mostraron la sofisticación de las operaciones madereras ilegales en los territorios de los indios Kayapó, tierras donde está estrictamente prohibido talar. Imágenes de satélites obtenidas por Greenpeace también revelaron detalles de estas operaciones.

Esta información fue entregada al Fiscal Federal de Brasil junto con la petición de una completa investigación al respecto.

En un intento de parar la apertura de la selva tropical a cargo de los madereros de caoba, el Gobierno de Brasil estableció en 1996 una moratoria para nuevas concesiones de caoba. Pero según la nueva información aportada por Greenpeace, muchas empresas están usando documentación falsa para justificar operaciones ilegales en zonas adyacentes a los territorios del pueblo Kayapó.

"La región amazónica es conocida por la violencia existente en contra de aquellos que la defienden. Haremos todo aquello que esté en nuestro poder para proteger a nuestra gente en la Amazonía brasileña, pero no nos intimidarán para que dejemos nuestro trabajo por defenderla. No nos callarán," declaró por su parte Marijane Lisboa, Directora Ejecutiva de Greenpeace Brasil.

En un trágico ejemplo reciente, el 25 de agosto el Coordinador del
Movimiento por el Desarrollo de la Transamazonía y la región Xingu
(MDTX), Ademir Alfeu Federicci (Dema), fue asesinado por un pistolero en su casa de Altamira, en el Estado Brasileño de Para. Dema no se pudo defender y fue disparado en la cabeza enfrente de su esposa e hijos. Dema era un activista de la resistencia a la construcción de presas en la región del Río Xingu, y se oponía
radicalmente a la explotación forestal ilegal en la región.

El Ministro de Justicia de Brasil, José Gregori, declaró el pasado martes que se siente horrorizado por esta amenaza de muerte contra Paulo Adario. En una reunión privada con Adario, el Ministro se comprometió a iniciar una investigación sobre este asunto y dio
instrucciones al respecto a la Policía Federal.

El Ministro de Medio Ambiente de Brasil, José Sarney Filho, también ha expresado su preocupación: “Quiero decir que tomo esta amenaza de muerte contra un miembro de Greenpeace como una amenaza directa contra mi persona. Porque Greenpeace no hace ni más ni menos que lo que nosotros hacemos. Por eso tienen nuestro total apoyo para asegurar la integridad física de un activista de Greenpeace. La relación entre el Ministerio y Greenpeace es muy estrecha y ha dado muchos resultados, reduciendo la magnitud de las operaciones forestales ilegales en la región”.

El lunes, José Carlos Dias, anterior Ministro de Justicia y prominente activista de los Derechos Humanos, expresó voluntariamente su apoyo a Paulo Adario y a Greenpeace. Amazonino Mendes, el Gobernador del Estado brasileño de Amazonas, afirmó que dará todas las garantías posibles para la seguridad de Adario, de manera que pueda continuar el trabajo de Greenpeace en la región.