Desde las propias estaciones de servicio de Shell, Greenpeace le exige que invierta en energía eólica

Noticia - 29 septiembre, 2001
Activistas estuvieron este sábado en las principales estaciones de la Shell para solicitar a los consumidores que se sumen a la iniciativa que Greenpeace propuso a la multinacional para que invierta en la generación de energía limpia en nuestro país.

Energía Eólica: Planta offshore de Molinos.

Activistas de la organización ambientalista Greenpeace estuvieron hoy en las principales estaciones de servicio de la empresa Shell con el fin de dar a conocer una propuesta para que esta multinacional invierta en energía eólica en la Patagonia. Bajo la consigna "Para detener el cambio climático, Shell debe cambiar", un grupo de activistas desplegó carteles en esas estaciones de servicio de la petrolera en Buenos Aires, mientras que otro grupo recolectó firmas de los propios clientes reclamando por inversiones en energías limpias a la empresa angloholandesa.

Por medio de una campaña publicitaria, Shell se presenta con una fuerte imagen de defensa ambiental y está alentando a la opinión pública a hacerle llegar opiniones sobre su comportamiento empresarial. Aprovechando esta campaña, la organización ecologista le está pidiendo a la población que apoye su propuesta para que Shell invierta en energías limpias. Greenpeace también convoca a hacerle llegar este reclamo a Shell por medio de e-mails que pueden ser enviados desde la página de Greenpeace

La organización ambientalista busca que Shell ingrese en el desarrollo de la energía eólica, con vistas a desarrollar tres proyectos en Chubut: uno en Rada TillyPuerto Madryn (con una potencia proyectada de 60 MW) y en Bahía Blanca

La campaña publicitaria de Shell procura destacar un fuerte compromiso de esa compañía con el desarrollo de las energías limpias, la preservación del ambiente y la protección del clima. "Lo cierto es que se dice mucho y es muy poco lo que se hace realmente, las inversiones de Shell en energías renovables son insignificantes en comparación con sus inversiones anuales en el desarrollo de nuevas reservas de combustibles fósiles, algo absolutamente incompatible con la protección del clima global", explicó Juan Carlos Villalonga, encargado de asuntos energéticos de Greenpeace Argentina.

La corporación petrolera, que en el marco de esa campaña ha abierto una discusión y consulta pública, recibió hace tres semanas a representantes de Greenpeace, quienes presentaron un proyecto de desarrollo de la región. Greenpeace cree que las condiciones naturales de la Patagonia y el actual marco regulatorio nacional hacen viable la propuesta de inversión en el sector eólico. Greenpeace convocó a Shell a ser parte del desarrollo eólico en la Argentina y ya son más de cinco mil los mensajes enviados a esa compañía por parte de gente desde distintos puntos del país reclamando que la petrolera invierta en energías limpias.

(con una potencia proyectada de 50 MW), otro en (con una potencia proyectada en 100 MW).

La actividad petrolera tiene una responsabilidad ineludible en la crisis climática global. La quema de combustibles fósiles es la principal causa del calentamiento global y la ciencia demuestra la necesidad de abandonar el uso de esos combustibles.

En un informe preparado por la organización ambientalista acerca de la actuación de Shell, se señala que algunas de las compañías petroleras, como es el caso de Shell y BP, "están ya manifestando su compromiso con el desarrollo de fuentes de energía limpia. A pesar de esto, invierten sumas insignificantes en energías renovables

"Estamos procurando que Shell se sume al desarrollo eólico en la Argentina, para ello le estamos planteando algunos proyectos que son factibles de desarrollar de manera inmediata", explicó Villalonga. "Estamos señalando dos proyectos en la Provincia de Chubut y otro en Buenos Aires, todos ellos serían posibles de desarrollarse rápidamente con la participación de una compañía como Shell".

Greenpeace publicó un informe en el que vuelve a enfatizar la necesidad de alcanzar una potencia eólica instalada de 3000 MW (megavatios) en el año 2010. Esa meta cubriría el 7% de la electricidad a escala nacional. Para el desarrollo de esa meta se estima necesario que grandes compañías de energía, como es el caso de Shell, se vuelquen al desarrollo de la energía del viento.

La energía eólica es hoy una industria exitosa que suministra electricidad a millones de personas, crea decenas de miles de puestos de trabajo y genera miles de millones de dólares en inversiones. En los últimos cinco años el crecimiento de la energía eólica ha sido del orden del 31% anual.

Shell, como empresa líder en el sector, debe asumir su responsabilidad e invertir en el desarrollo de las energías limpias, como es el caso de la energía del viento en el Cono Sur. El compromiso de Shell con esta fuente de energía sería determinante para producir el despegue de la actividad y la movilización de otras empresas de energía en la misma dirección.

Shell es una de las compañías petroleras más importantes a escala global y en 1997 creó una rama dedicada al desarrollo de proyectos en energías renovables. Durante el año 2000, Shell comenzó a participar en algunos proyectos eólicos en Europa. "Estos gestos deben trasladarse a una acción global. El proceso acelerado de deterioro del clima exige de inversiones a gran escala que permitan que las energías limpias alcancen un papel preponderante en las próximas décadas. No hay otra solución frente al cambio climático", concluyó Villalonga. comparado con lo que anualmente destinan a la exploración y extracción de fósiles".