Chanchitos rosas en la Casa Rosada
Greenpeace exigió hoy al presidente de la Nación, Néstor Kirchner, que intervenga rápidamente para salvar de la destrucción a la Reserva Natural de Pizarro, en Salta.
La iniciativa de la entidad incluye una colecta nacional e internacional de recaudación de fondos para re-comprar las tierras de la Reserva Natural , que fue desafectada de su condición de área protegida y luego loteada y rematada por el gobernador Juan Carlos Romero.
Activistas de Greenpeace colocaron esta mañana doscientos chanchitos alcancías, con la leyena “K. Salvá la Reserva”, en la adyacencias de la Casa Rosada, como forma de hacer público su reclamo al presidente para que intervenga y libere los fondos necesarios para incluir las tierras en el sistema nacional de áreas protegidas bajo la órbita de la Administración de Parques Nacionales (APN).
“El futuro de la Reserva Natural de Pizarro está en manos del presidente Kirchner, si no interviene, el gobierno de Salta entregará el permiso de desmonte a los empresarios y la Reserva de Pizarro desaparecerá para siempre”, declaró Juan Casavelos, responsable de la Campaña de Biodiversidad de Greenpeace.
Las donaciones se aceptan vía telefónica llamando al (011) 6776-6777 , el dinero recaudado será donado a la (APN) para que los destine a la compra de las tierras de Pizarro y para el desarrollo de proyectos productivos sustentables que incluyan a sus habitantes.
“Estamos ante un hecho sin precedentes: si se concreta, será la primera vez que un gobernante decide quitarle la categoría de área protegida a una reserva natural para permitir realizar cultivos en ella”, agregó Casavelos.
El presidente del Directorio de la APN, Héctor Espina, manifestó el interés de la entidad para comprar la Reserva e incluirla en el sistema nacional de áreas protegidas.
“Sin dudas esta es una señal muy positiva de un funcionario del gobierno nacional, queremos reforzar este interés y apuntalar el compromiso de salvar la Reserva, por eso lanzamos la colecta con lo cual contribuimos a facilitar la recuperación de las tierras”, manifestó Casavelos.
“El gobierno nacional tiene el dinero necesario para devolverle la condición de reserva a Pizarro y revertir la insólita iniciativa del gobernador Romero. Esto es un deber moral porque, además de ser una ecosistema muy valioso y único, allí vive una comunidad wichí que perderá sus recursos y su identidad cultural debido al desmonte, lo mismo sucede con mil pequeños productores criollos, que obtienen del monte los recursos necesarios para criar ganado y para pequeños cultivos", sostuvo Casavelos.
Según Casavelos, "Kirchner anunció en diciembre pasado que la protección de los bosques nativos es uno los ejes principales de la política ambiental del Estado. Esta es una oportunidad para demostrar con hechos que realmente le importan el bosque y sus habitantes, las comunidades aborígenes y criollos. Ya no hay tiempo, debe rescatar la Reserva”.
La Reserva de Pizarro ubicada en el departamento de Anta, Salta, fue creada a fines de 1995 y desafectada y rematada, en 2004, por el Gobierno provincial, que promueve la explotación agropecuaria de las tierras con el argumento de que se encuentran degradadas. En esa región, la tasa anual de deforestación para el período 2000-2004 triplica la media mundial.
Las 25.000 hectáreas originales del área conservan sectores de transición entre la selva de Yungas y del Chaco Semiárido que constituyen el más valioso bosque de Argentina actualmente amenazado por un vertiginoso avance del agro.
Greenpeace junto con la Fundación Vida Silvestre Argentina (FVSA), la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN) y Fundación Illay de Salta presentaron el 4 de abril un recurso de queja ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación que forma parte de la batalla legal que vienen impulsando para impedir la venta y la destrucción definitiva del área.
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