Luego de once días de no cazar ballenas, la flota ballenera japonesa se reaprovisiona y descarga la carne en barco panameño.

Noticia - 22 enero, 2008
En una protesta no violenta los activistas interpusieron sus botes inflables entre el barco factoría y el barco de reaprovisionamiento, evitando la descarga de combustible.

Luego de evitar exitosamente que la flota japonesa pueda cazar en el Santuario Ballenero Austral, en la Antártida, activistas del barco de Greenpeace “Esperanza” impidieron hoy durante varias horas que el barco factoría Nisshin Maru se reabastezca de combustible y descargue carne de ballena en el barco de bandera panameña Oriental Bluebird.

Luego de evitar exitosamente que la flota japonesa pueda capturar ballenas en el Santuario Ballenero Austral, en la Antártida, activistas del barco de Greenpeace “Esperanza” impidieron hoy durante varias horas que el barco factoría Nisshin Maru se reabastezca de combustible y descargue toneladas de carne de ballena en el barco de bandera panameña Oriental Bluebird.

Mas tarde la maniobra entre los barcos balleneros fue posible cuando los activistas se retiraron ya que la operación comenzaba a resultar peligrosa para sus vidas.

Si bien el gobierno del Japón otorga unilateralmente un permiso para que sus seis barcos realicen la llamada “caza científica”, el barco panameño no consta de la misma autorización. Asimismo este barco, Oriental Bluebird, no cuenta con la documentación necesaria sobre impacto ambiental, requerida por el Tratado Antártico, para operar en esa área. 

“El Gobierno de Panamá, que tiene una posición en defensa de las ballenas en la Comisión Ballenera Internacional (CBI) y en otros foros, al autorizar al Oriental Bluebird a unirse ilegalmente a la flota ballenera, esta en efecto siendo parte de la caza de ballenas en el Santuario Ballenero Austral”, expresó Mir Rodríguez, activista panameño a bordo del Esperanza.

 



“Panamá debe ordenar inmediatamente al Oriental Bluebird que se retire del área para dejar de apoyar a la flota ballenera”. En una declaración leída por radio desde el Esperanza al Oriental Bluebird, en los idiomas español, japonés e inglés, el Coordinador de la Campaña de Ballenas de Japón, Sakyo Noda manifestó “El oriental Bluebird debe dejar las aguas de la Antártida inmediatamente: su presencia no es bienvenida y es una amenaza para las prístinas aguas del medioambiente antártico, que ha sido declarado como un área particularmente sensible por la Organización Marítima Internacional (OMI), y una "reserva natural, dedicada a la paz y la ciencia" por el Tratado Antártico.

Una operación de reaprovisionamiento de combustible en el área del Tratado es contraria al espíritu del mismo. Japón como parte de este Tratado, debe cumplir con la carta y el espíritu del tratado, y no reaprovisionar combustible en esta área, cumpliendo con el Anexo IV sobre Prevención de Contaminación Ambiental”

“El barco panameño realiza prácticamente la misma operación que el barco factoría Nisshin Maru: transportar la carne de ballenas cazadas por los arponeros, no hay dudas de que es parte de la flota cazadora”, agregó Milko Schvartzman, Coordinador de la Campaña de Ballenas.