¿Una casa en pleno centro de Bogotá? Se estabas por allí seguro la viste. No era una casa común y corriente, era una “casa cáncer” de esas a las que Eternit ya nos tiene acostumbrados. En su interior recreamos cómo se vive en una de estas construcciones cancerígenas: una familia que hacía todas sus actividades cotidianas con máscaras para no respirar asbesto, la fibra tóxica que está en las tejas que la empresa Eternit nos vende. Sigue leyendo y te contamos más.

 

Eternit se enorgullece de haber cubierto más de 300 millones de metros cuadrados con sus materiales para la construcción pero lo que no te dice es que esos materiales son tóxicos, contienen asbesto blanco, una fibra que con solo respirarla podría causar cáncer. 120 mil personas mueren cada año por inhalar asbesto pero parece que a Eternit no le importa.

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El asbesto está prohibido en más de 55 países en el mundo pero no en Colombia. Este vacío legal es lo que le permite a Eternit mantener su doble estándar: exporta productos sin asbesto al mundo y a los colombianos nos vende materiales tóxicos. ¡Es inaceptable!

Para advertir sobre esta situación es que recreamos la “casa cáncer” en el centro de Bogotá. Una parte clave de la actividad fueron nuestros voluntarios, como siempre. Una vez más poniendo el cuerpo para actuar por una causa justa e importante.

“Me sentí muy bien aportando un granito de arena y pudiendo expresar el inconformismo y el desacuerdo ante algo que enferma y le hace tanto mal al ser humano. Ver cómo la gente apoya y respalda la causa hace que valga la pena el riesgo”, dice Urbano Chavarro que hizo de abuelo en la escena.  

Silvy Alejandra Ramos, que actuó de niña en la “casa cáncer” sostuvo: “Antes de la actividad, tenía bastantes expectativas ya que era mi primera participación en una demostración y como muchos voluntarios, había esperado para que llegara ese día. Durante la demostración llegaron los nervios habituales debido a la atención de tantas personas puesta en nosotros y en cada movimiento que hacíamos; sin embargo nuestros compañeros nos brindaron todo el apoyo suficiente para lograr que todo saliera muy bien. Tuve siempre el objetivo de expresar la preocupación que nos motivó a iniciar la campaña, la misma preocupación que invade el pensamiento de muchos colombianos víctimas del asbesto.

¡Qué alegría contar con este maravilloso equipo de voluntarios que nos ayudan a hacer realidad cada una de las denuncias que tenemos!

¿Qué puedes hacer tú?

Suma tu firma para pedirle a Eternit que deje de fabricar productos con asbesto blanco, la fibra que está enfermando a Colombia. Haz click aquí.

Si quieres saber más lee: [VIDEO]: LAS “CASAS CÁNCER” DE ETERNIT.