Oso polar en el Ártico

Los grandes bloques de hielo del oceáno Ártico son un gran espectáculo que dejamos atrás. La siguiente parada es Pyramiden, un lugar donde hace años hubo una mina de carbón ahora el lugar está abandonado.

Aprovecho el trayecto para hacerla de ayudante en la cocina de Daniel Bravo, quiere preparar una cena mexicana para la tripulación: hacemos quesadillas, guacamole, frijoles y una salsa bien picosa. ¡Qué halagada me siento cuando el experto chef pregunta mi opinión sobre el sabor de la salsa! Este chico que empezó siendo voluntario hace años, se ha convertido en parte activa de la organización y en pieza fundamental para este barco. Y es que el corazón de todo Greenpeace son los voluntarios, son la fuerza que sostiene a la organización. A bordo viene Karen, una voluntaria sueca que ha realizado investigaciones para la campaña del Ártico durante 2 años, también ha tomado parte activa en protestas contra la energía nuclear en su país y en Finlandia. Es amable, inteligente y siempre está dispuesta a ayudar. También viene Judith, de Holanda, quien se encarga de clasificar la basura en el barco y asegurarse que ésta ocupe el menor espacio posible: separa la basura orgánica, latas, vidrio, papel y plástico. El tema de la basura es sustancial en el barco, siempre se trata de generar la menor cantidad posible y compactarla al máximo.

Confirmo que independientemente de la nacionalidad, los voluntarios de Greenpeace son personas apasionadas, soñadoras y dedicadas, que aportan su tiempo y esfuerzo para construir un mundo mejor. En el mundo hacen falta más voluntarios para todas las causas, para todas las luchas, así tendríamos un mejor lugar para vivir.

Hoy subo, como todas las noches, al puente de mando del barco, se ha convertido en una apreciada costumbre ver los diferentes escenarios que componen el Ártico; el de hoy es: mar y glaciares. En este lugar hay dos radares de navegación, cartas naúticas, ecosondas, equipos para ser usados al operar con helicópteros y computadoras con programas de meteorología. A propósito, Ignacio María escribió algo que me emocionó: Más que ser un buque bien equipado, pintado de verde con símbolos de paz, el Arctic Sunrise es un guerrero del Arcoiris que no deja de pelear.