El lunes 8 de marzo un magistrado federal ratificó la suspensión de siembra de maíz transgénico, debido a que las empresas no pudieron comprobar que son inocuos y seguros para el medio ambiente. Esta suspensión está vigente mientras se desarrolla el juicio de acción colectiva que presentó La Colectividad del Maíz, integrada por la comunidad campesina, científica y sociedad civil, hace casi tres años.
¿Qué significa la suspensión?
1.- NO se puede sembrar maíz transgénico en México para su comercialización. O sea, no es maíz que pueda ser vendido ni comprado por empresas.
2.- Las autoridades NO pueden dar permisos para siembras comerciales.
3.- Se ponen candados a las siembras en fase experimental y piloto.
- En estas fases, los cultivos deben cumplir con rigurosas medidas de seguridad –deben realizarse en ambientes controlados- para evitar cualquier riesgo de contaminación.
- El fallo judicial, permite a científicos de la Colectividad del Maíz, monitorear los cultivos transgénicos, incluyendo el impacto del glifosato, herbicida catalogado por la OMS como probable cancerígeno para las personas.
- En caso de detectar irregularidades, la Colectividad del Maíz puede impugnar los permisos de siembra para que sean revocados.
¿Por qué es una buena noticia para nosotros?
- Que un magistrado federal ratificara la suspensión de siembras de maíz transgénico a escala comercial, es darle la razón a la sociedad civil sobre las empresas.
- El fallo detiene las intenciones de las trasnacionales para sembrar maíz transgénico a gran escala en México.
- Las compañías trasnacionales NO han podido demostrar que los transgénicos sean seguros para la salud de las personas y el medio ambiente.
- El juez reconoce el interés legítimo de la comunidad científica independiente que integra la Colectividad del Maíz y les permite monitorear los impactos de los transgénicos, incluyendo el glifosato, cosa que antes no se podía, pues eran las mismas empresas las que se monitoreaban a sí mismas.
¿Por qué las empresas celebran este fallo?
1.- Anteriormente, las empresas NO podían sembrar maíz transgénico en ninguna de sus fases (experimental, piloto, comercial).
2.- Pese a que ahora pueden hacerlo en fase experimental y piloto, la sociedad civil podrá monitorear sus acciones, y en caso de irregularidades podrá exigir la revocación de los permisos.
¿Qué sigue?
La suspensión de siembras de maíz transgénico a escala comercial se mantendrá hasta que concluya el juicio de acción colectiva sobre este tema.
Es por ello que debemos seguir alerta. Hemos dado un gran avance, pero aún falta mucho por hacer. Firma nuestra petición y ayúdanos a seguir luchando.
Mas información:
Si quieres saber más sobre el tema puedes leer la nota en Sin Embargo.