El barco Arctic Sunrise de Greenpeace llega al puerto de Key West, Florida. En los próximos tres meses, varios equipos de científicos independientes se unirán a la tripulación a bordo del Arctic Sunrise, para llevar a cabo una serie de programas de investigación científica que contribuirán a la comprensión de los impactos del petróleo y dispersantes químicos sobre el ecosistema del Golfo a raíz del derrame de la empresa British Petroleum. La fuente de donde salía el petróleo se localizaba a más de kilómetro y medio de profundidad y a 80 kilómetros de la costa de Luisiana. Para disolver el petróleo derramado en el mar se usaron más de un millón de galones de Corexit, un dispersante sumamente tóxico.
© Todd Warshaw / Greenpeace