Demanda Greenpeace detener perforaciones en aguas profundas del Ártico

Noticia - 23 abril, 2011
Turquía. Un grupo de once activistas de Greenpeace permanecieron alrededor de 20 horas ocupando la plataforma petrolífera Leiv Eiriksson operada por el gigante energético Cairn Energy, que busca empezar este año a perforar las aguas del Ártico en busca de hidrocarburos.

Los activistas interrumpieron la salida de la plataforma del puerto de Besiktas (Turquía) con destino a la Bahía de Baffin en Groenlandia en una acción que comenzó este 22 de abril a las 5:40 de la mañana en el marco del Día de la Tierra.

Los activista llegaron a bordo de lanchas inflables a interceptar la plataforma, escalaron y desplegaron una pancarta con el lema: “Stop Arctic destruction” (“Alto a la destrucción del Ártico").

"La Leiv Eriksson, operada por la empresa Cairn Energy, es el equipo más peligroso del mundo ya que está destinado a iniciar nuevas perforaciones en alta mar en el Ártico lo cual implica un claro e inmediato peligro para el frágil medio ambiente del Ártico", declaró Ben Ayliffe, responsable de la campaña de energía y clima de Greenpeace Internacional.

Las condiciones meteorológicas extremas del Ártico hacen que Cairn Energy disponga de un periodo de tiempo muy corto para llevar a cabo la perforación de los cuatro pozos exploratorios ubicados a alrededor de 1.500 metros de profundidad. Estas profundidades son similares a las del pozo Macondo de BP en el Golfo de México. Las temperaturas extremadamente bajas, el mal tiempo y un lugar de difícil acceso plantean retos sin precedentes en el caso en que se diera un accidente en la plataforma en el Ártico e implica incluso que podría llegar a ser imposible contener y limpiar un posible vertido.

La Bahía de Baffin es uno de los espacios naturales más frágiles del mundo. Es el hábitat de una fauna silvestre especialmente vulnerable entre la que destacan la gran mayoría de la población mundial de narvales, así como ballenas azules, colonias de aves marinas, y osos polares.

"La Leiv Eriksson está encabezando una nueva fiebre del petróleo en el Ártico. Aún podemos cambiar las cosas y proteger esta región, pero sólo si conseguimos obligar a las empresas contaminantes y a los políticos que las apoyan a tomar medidas ambiciosas para reducir nuestra dependencia del petróleo", concluyó Ayliffe.

Al intentar detener las operaciones de la plataforma Leiv Eiriksson en las aguas turcas de la bahía de Baffin, Groenlandia, activistas de Greenpeace realizaron una acción directa no violenta para proteger el prístino entorno ártico de la explotación petrolera. © Markel Redondo / Greenpeace

Categorías