Noticia - 1 agosto, 2014
El 19 de septiembre de 2013, la guardia costera rusa abordó ilegalmente al barco Arctic Sunrise - rompehielos de Greenpeace –, tras una protesta pacífica de alto perfil contra la perforación petrolera en el Ártico. En ese momento fueron detenidos 28 activistas y dos reporteros freelance. La nave trasladada al puerto de Murmansk, en Rusia, donde permaneció por más de 300 días sin mantenimiento.
Hoy finalmente nuestro emblemático navío, que ha sido el emblema de la defensa del Ártico, viaja nuevamente a casa. Fue el pasado 6 de junio de 2014, cuando la Comisión de investigación de Rusia informó a Greenpeace Internacional que había sido anulada la detención del barco. Fue hasta el 27 de junio cuando el capitán Daniel Rizzotti y una tripulación de Greenpeace, pudo acceder a la nave para evaluar las condiciones de deterioro después de 10 meses sin mantenimiento. La navegación, los sistemas de comunicaciones y de seguridad habían sido retirados o destruidos.
Ahora, el Arctic Sunrise viaja hacia Amsterdam, donde tendrá que someterse a extensas reparaciones, para después volver a proteger el Ártico de las petroleras imprudentes como Shell y Gazprom.
Se espera que el Arctic Sunrise llegue a Amsterdam próximamente, donde activistas de Greenpeace y simpatizantes de la organización, junto con los 30 del Ártico le darán la bienvenida a la nave, antes de entrar en un astillero para una evaluación exhaustiva de su condición y las reparaciones necesarias. l Comité de Investigación de Rusia informó recientemente a Greenpeace de que había ampliado su investigación sobre el caso de los 30 del Ártico hasta el 24 de septiembre 2014, a pesar que la causa penal contra los activistas se ha archivado.
El abordaje ilegal y detención del Arctic Sunrise, así como la investigación en curso sobre la protesta de los 30 del Ártico fue un intento de intimidar y reprimir el debate acerca de la perforación petrolera en el Ártico, pero esto sólo nos ha hecho más fuertes.
Millones de personas se pronunciaron contra el encarcelamiento ilegal de los 30 del Ártico. Estos mismos millones de personas saben que el planeta se está calentando y que el hielo en el Ártico se está derritiendo y continuarán a oponiéndose pacíficamente a la búsqueda temeraria de petróleo en el Ártico tanto en Rusia como otras parte del mundo.
