Ciudad de México.- Los senadores que analizan la iniciativa de Ley General de Biodiversidad presentaron un nuevo borrador de esta legislación en el que, a pesar de incluirse algunos avances, sigue sin ser debatido el fondo de la iniciativa: el acceso a los recursos genéticos.
Como se encuentra redactada la nueva versión de la ley, el título II de la iniciativa abriría la puerta abierta a la privatización de los recursos genéticos y omitiría garantías para defender los derechos de los pueblos y comunidades indígenas y campesinas que los conservan.
Voluntarios de Greenpeace México se manifestaron pacíficamente este jueves ante el Senado de la República para rechazar la iniciativa planteada en octubre pasado por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) a través de la senadora Ninfa salinas. Los manifestantes apelaron a la conciencia de los miembros de la Comisión de Medio Ambiente y Recursos Naturales del Senado, que tenían programado votar el dictamen este mismo día. Sin embargo, aunque constaba en la orden del día del Senado, la sesión se canceló sin previo aviso ante la ausencia de los senadores y senadoras de la comisión.
“Nos sorprenden los tiempos con que quieren aprobar esta ley, sin que haya un verdadero debate plural e informado en el que México decida realmente qué quiere hacer con sus recursos naturales”, aseguró Miguel Rivas, campañista de Greenpeace México. “En este debate amplio que buscamos se deben de consultar a todos los sujetos de derechos, particularmente a las comunidades indígenas y campesinas que están en peligro por custodiar la biodiversidad, el patrimonio genético y el conocimiento asociado a ambos”, añadió.
“La prioridad para México, una que ha sido señalada por distintas voces y en distintas ocasiones, es proteger la inmensa y única biodiversidad del país de un entorno económico internacional cada vez más amenazante. Antes que hablar del aprovechamiento de esos recursos, es necesario resguardarlos con un marco legal sólido”, explicó a su vez Gustavo Ampugnani, director de Greenpeace México.
Los voluntarios de Greenpeace repudiaron la ley de biodiversidad desplegando mensajes en las entradas delantera y posterior del Senado. Asimismo, voceros leyeron un posicionamiento ante la entrada principal, en el que se recordó a los senadores y se informó a la ciudadanía en general de los riesgos implícitos en la forma en que está redactada la iniciativa de ley.
La protesta de Greenpeace hace eco de un comunicado emitido el miércoles por parte de distintas organizaciones sociales (como la Campaña Nacional Sin Maíz No Hay País, la Caravana de la Diversidad Biocultural, el Grupo de Estudios Ambientales y Greenpeace México) e intelectuales (como Elena Poniatowska, Sergio Aguayo y Víctor Toledo Manzur), donde repudiaron “la artimaña legislativa” y el intento de dictaminar la ley de biodiversidad “en fast track”.
Para aprobarse en este periodo ordinario de sesiones, la iniciativa de Ley General de Biodiversidad debería ser discutida antes del 1 de mayo. Es decir, en sólo diez días.
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