Alejandra Martínez es voluntaria del Equipo de Voluntarios en Concepción, y escribió este blog sobre la cicletada que realizó con su equipo en esa ciudad.

¿Se imaginan lo sencillo que es hacer deporte y cuidar nuestro planeta al mismo tiempo? Desde hace mucho tiempo es sabido que una de las formas más simples y fáciles para disminuir nuestra huella de carbono es reducir el uso de auto, (y transporte público en su defecto) por lo que la mejor forma de movilizarse por las calles de tu ciudad es la bicicleta. El uso de la bicicleta, ya sea para ir al trabajo, lugar de estudios, o simplemente para pasear nos brinda más de un beneficio, podemos disfrutar el paisaje y hacer actividad física a la vez, y lo mejor de todo es que es 100% amigable con el medio ambiente, ya que no contamina.

Este es el caso de la “Cicletada por la Tierra”, una instancia de convocatoria familiar, que se llevó a cabo el día 27 de abril, en la ciudad de Concepción. Se dio inicio a esta en la Plaza de la Independencia, en donde voluntarios del equipo local esperaron desde las 11 hrs la llegada de los ciclistas, para inscribir a los asistentes, darles la bienvenida y comentarles la ruta, también instancia perfecta para compartir con la comunidad cercana, hablarles sobre la organización y nuestra actual campaña de plásticos. Junto a los ciclistas y con la ayuda de Carabineros de Chile, encargados del tránsito, dimos la partida a las 12 de la tarde.

Personalmente me sentí muy nerviosa, ya que fui la voluntaria encargada de dirigir la ruta, nunca había participado de una actividad de este tipo, no conocía muy bien la ruta y la bicicleta me quedaba un poco grande. Sin embargo, a la vez sentí seguridad al saber que en cada esquina en la que debimos doblar había un voluntario del equipo indicando a mi y a todos los ciclistas hacia donde ir, además del carabinero que nos siguió todo el tiempo en su motocicleta. Definitivamente mi parte favorita del circuito fue pasar por el Parque Ecuador, recorrimos más de la mitad y el día estaba perfecto para apreciar todos los colores del otoño a través de las hojas de diversos árboles en la ciclovía.

Finalizado el recorrido y sin accidentes ni inconvenientes, los voluntarios del equipo nos esperaban con entusiasmo en la misma Plaza de la partida, luego al estar todos presentes, sorteamos premios a los ciclistas y además repartimos un pequeño snack que consistía en una bolsita con frutos secos, para luego despedirnos, y comentar lo felices que estábamos de que hayan asistido, agradecer su asistencia y recalcar por última vez el por qué de la cicletada, que en este caso fue generar conciencia sobre el cambio climático y la problemática del plástico.

Como equipo creemos que fue una actividad muy enriquecedora, ya que hace más de un año que no hacíamos una cicletada en Concepción, fue una grata instancia para compartir con personas conscientes, y además que algunos ciclistas se vieron interesados en formar parte del equipo en un futuro no lejano. Como toda actividad tenemos varios aspectos para mejorar, pero estamos más motivados que nunca para seguir trabajando por un mundo mejor.