Victoria es voluntaria de nuestro Equipo de Apoyo Local en Concepción, y hace unos días fue quien le dió voz a la Historia del Rainbow Warrior en un cuentacuentos que dejó a grandes y chicos encantados.
Hace unas semanas me preguntaron si quería participar de un cuentacuentos, cuando me lo explicaron por un lado me sentí súper emocionada de poder ser parte y aportar con mi granito de arena a la organización y por el otro soy profesora de Educación Básica, entonces comprendo que niños y niñas necesitan espacios de distracción en estos tiempos de estar en casa.
El cuento para esta ocasión es “La Historia del Rainbow Warrior”, una ballena que le canta a su ballenato la historia de este guerrero. Es increíble lo fácil que es de entender y lo sencillo que es introducirse en la historia y ser parte de ella, me sentía como el ballenato cada vez que la leía. La sensación es muy parecida a conocer alguno de los barcos de la organización, lo impresionante que es poder VER a nuestros guerreros de corazón mecánico, te acercas a un barco que para muchos es uno más, pero para ti es de las cosas más impresionantes que vas a ver en tu vida, porque no puedes creer que EL ha estado por todas partes del mundo luchando por lo que tú crees correcto, en ese momento sabes que tienes un aliado INVENCIBLE que te cubrirá la espalda, que cada persona que es parte de Greenpeace también ES ese aliado que te cubre la espalda y que hace posible todo lo que hacemos, en ese momento no importa si eres voluntario/a, socio/a o un trabajador, todos y todas somos uno.
Cualquiera pensaría que contar un cuento es fácil… pero no lo es tanto, al menos no lo fue para mí, cuando “audicioné” fue un chiste: en el primer video le puse mucha emoción y no parábamos de reír, luego fue muy plano, recién en el tercer video logramos encontrar el balance que me dio el gran honor de ser parte de este hermoso proyecto.
Por su puesto este también fue un trabajo en equipo y literal en familia, mi hermana que también es voluntaria de la organización hizo todo el detrás de cámara, mi papá tuvo que sacar de paseo a nuestros perros ya que les gusta ladrarle hasta el viento. Luego de eso se agregaron imágenes de fondo para que quedara ¡INCREIBLE!
Al principio de la sesión estaba muy nerviosa por ser la primera vez que hacía algo así, y además un poco intimidada por la cantidad de niños y niñas conectadas, ¡fueron más de 100! También había adultos, y es que esta historia es tan linda que no importa la edad que tengas, la disfrutas igual. No quería equivocarme, pero de a poco tomé confianza y me sentí muy cómoda y emocionada. Para mí como voluntaria es súper importante realizar este tipo de actividades, sobre todo tomando en cuenta el contexto de pandemia que estamos viviendo, sinceramente espero que este sea el primer cuentacuentos de muchos más, que sean historias sobre cómo estamos tratando de ayudar a nuestro planeta, de cómo cuando trabajamos juntas y juntos somos Guerreros del Arco Iris.