Desde 2005, el calendario marca cada 17 de mayo como un nuevo Día Mundial del Reciclaje. La fecha, establecida por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), busca difundir y afianzar la importancia de la separación en origen de los residuos y su posterior y adecuado tratamiento para recuperar materiales, reducir la basura y cuidar al ambiente.

En este espacio siempre mantenemos la conversación abierta sobre el tema porque es una de las mejores herramientas con las que contamos, desde ciudadanos a empresas y gobiernos, para reducir el impacto de nuestros hábitos de consumo e impulsar la economía circular. 

Reciclar, ¿cómo ayuda al planeta? 

Primero, reciclar ahorra energía porque elimina la necesidad de fabricar materiales desde cero. Es innegable que extraer, transportar y transformar los recursos naturales en papel, plástico o metales demanda mucho más trabajo y energía que recuperar los descartados y reciclarlos. Y esto ya es una ventaja en sí misma. 

Por otro lado, enviar menos basura a los vertederos o basurales a cielo abierto disminuye los gases de efecto invernadero que emanan de ellos (que son 6% del total de GEI) colaborando a combatir el cambio climático.

Otro de los pros de reciclar es que evita que materiales que tardan décadas y hasta siglos en degradarse contaminen el ambiente, con lo cual se cuida a la flora, fauna y al suelo.

A nivel de cada persona, separar los residuos es la mejor manera de entender que los objetos que pasan por nuestras manos dejan una huella y que reciclando podemos hacer una diferencia.

Para dejar aún más en claro por qué éste es un hábito que debería ser universal, te compartimos datos concretos sobre el ahorro de energía y de recursos que implica reciclar versus producir con materias primas vírgenes.

Aluminio 

Cuando recién se descubrió este metal, supo ser más caro que el oro y la plata. Hoy, solo en Estados Unidos la cantidad de aluminio desechado en 3 meses es tanta que sería suficiente para reconstruir toda la flota comercial de aviones de ese país, según datos del Fondo Ambiental de Defensa. 

Fue de los primeros materiales en ser reciclados y sigue siendo el más eficiente para reutilizarse en términos de costos y ahorro de energía.

Reciclar una lata de aluminio ahorra 95% de la energía necesaria para fabricar una nueva. Y tiene la enorme ventaja de que sus cualidades nunca se degradan.  

Papel

Fabricar papel a partir de pulpa reciclada y no de celulosa virgen requiere un 60% menos de energía. A su vez por cada tonelada de papel reciclado se ahorran más de 30 mil litros de agua.

Vidrio 

Éste es otro de los materiales que pueden reciclarse una y otra vez sin perder su calidad. Recuperarlo ahorra 38% de energía comparado con fabricar envases con materia prima nueva. 

Además, reduce la contaminación del aire en 20% y del agua en 50%, según un reporte de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA.)

Plásticos

Existen 7 tipos diferentes de plásticos y todos tienen la particularidad que al reciclarse pierden sus propiedades y se transforman en materia prima de menor calidad. A ese proceso se lo llama down cycle y reutiliza plásticos más resistentes en fibras para alfombras, madera plástica o tela polar. 

A pesar de esto, reciclar plástico también ayuda al ambiente. Según un reciente estudio elaborado por la industria, el ahorro total de energía al reciclar plástico PET es de 79 % y 88 % para polietileno y polipropileno de alta densidad. Las reducciones de emisiones fueron del 67 y del 71 por ciento respectivamente.

En conclusión, cuando reciclas no sólo estás reduciendo la basura sino que estás colaborando en muchos aspectos para cuidar más y mejor a nuestro planeta 🌎🍃