
“Los árboles están queriendo decirnos algo desde hace mucho tiempo sólo que hablan en una frecuencia demasiado suave como para que las personas los escuchemos”
Richard Powers, escritor estadounidense
Te queremos contar un secreto (aunque quizás ya lo sepas): los árboles son seres magníficos. Tras su presencia es apacible y estoica porque guardan historia, sabiduría, fuerza vital, lazos comunitarios y una conexión profunda con todo lo que sostiene la vida, tal como la conocemos. En esta nota te contamos algunos datossobre ellos para que te maravilles y quieras cuidarlos aún más.
1. Son de los organismos vivos más antiguos que existen

El primer dato es asombroso: los árboles es que están entre los organismos vivos más longevos de la Tierra. En Chile el alerce abuelo alcanza los 30 metros de altura y tiene una edad estimada de 5.486 años. Es decir que es 600 años más antiguo que el pino bautizado Matusalén, que vive en California y que es el árbol no clonal más antiguo del mundo, una planta que no comparte un sistema radicular común. Dentro de la familia de los árboles clonales, que viven más tiempo aún, se puede mencionar el ejemplo del Old Tjikko de Suecia, una pícea de Noruega que se cree que tiene 9558 años.
2. Tienen memoria (de verdad)

La segunda característica que demuestra la infinita complejidad de los árboles es que poseen una especie de “memoria hídrica” que influye en su capacidad para adaptarse al cambio climático. Así lo comprobó un equipo del Instituto Federal Suizo de Investigación Forestal, de la Nieve y del Paisaje. Los árboles responden a los cambios climáticos inmediatos, pero, sobre todo, guardan un recuerdo de las condiciones hídricas previas.
Este fenómeno, denominado «memoria ecológica», está permitiendo a los científicos comprender cómo los árboles podrían enfrentar los efectos del cambio climático en el futuro, según un artículo de Phys Org.
3. Nos recuerdan que pertenecemos a algo más grande

Los árboles son seres que (sobre) viven en las ciudades que habitamos. Aún confinados a respirar a través de un pequeño cuadrado de tierra en las veredas, contorsionándose para adaptarse al poco espacio que queda entre edificios, resistiendo los daños de camiones que arrancan sus ramas y podas inescrupulosas, ellos resisten, brotan, florecen, dan frutos.
En medio de urbes grises, dan hogar a aves y algunos insectos, y por sobre todo, nos recuerdan -igual que el cielo, el sol, la lluvia y las estaciones- que los humanos también somos naturaleza, que la necesitamos para estar sanos y felices. Nos reconectan con una pertenencia mucho más amplia y ancestral, con la vida misma.
4. Sólo cuidando a los árboles y a los bosques podremos lograr limitar el aumento de la temperatura global en 1.5°

Los árboles son uno de los depósitos de carbono más importantes del planeta; porque absorben este elemento del aire mediante la fotosíntesis y lo almacenan en sus hojas, raíces y troncos. Esto significa que esta función ayuda a regular el clima de la Tierra.
Sin embargo, cada año, 10 millones de hectáreas de bosques -equivalente al tamaño de Portugal- son destruídas por la actividad humana, según datos de la ONU . Este daño es devastador para la biodiversidad incluyendo a las personas que dependemos de ellos para alimento, agua potable sombra y medicina, por ejemplo. Y no sólo esto, sino que la deforestación hace que se liberen 5.6 mil de millones de toneladas de gases de efecto invernadero al año, equiparable a las que producen la industria de la aviación y del transporte juntas.
Si protegemos y restauramos los bosques y cuidamos a cada árbol, las emisiones se podrían reducir de manera drástica (en 4 gigatoneladas por año), lo que ayudaría a lograr que el calentamiento global no suba de los 1.5°C recomendados en el Tratado de París.
Además, a medida que el aumento de las temperaturas y las olas de calor se vuelven moneda corriente, las ciudades pueden beneficiarse de los árboles que permiten enfriar las urbes entre 2 y 8°C.
¿Qué se necesita para proteger nuestros árboles y bosques?
🌳 Exijamos políticas ambientales más ambiciosas: Los gobiernos deben tomar medidas urgentes para proteger nuestros bosques y combatir la crisis climática.
🌳 Pidamos justicia y avancemos en la legislación ambiental para frenar la deforestación y los incendios forestales: es urgente avanzar hacia la penalización de estos crímenes ambientales.
🌳 Plantemos árboles nativos: Al elegir especies autóctonas de cada región, contribuimos a restaurar los ecosistemas locales y a fortalecer la biodiversidad.
🌳 Cuidemos los espacios verdes urbanos: Los parques y plazas son pulmones verdes que mejoran nuestra calidad de vida.
🌳 Apoyemos iniciativas de reforestación: Participemos en proyectos de restauración de bosques y apoyemos a las organizaciones que trabajan en la protección y defensa de nuestros ecosistemas.
Los árboles han sobrevivido a cambios climáticos y cataclismos a lo largo de la historia. Hoy, más que nunca, necesitamos su fortaleza y resiliencia. Un primer paso, es detener los desmontes, así estaremos asegurando un futuro más verde y saludable para las próximas generaciones, o al menos dando esa oportunidad.