Los bosques son de los primeros ecosistemas que aprendemos a identificar. Quizás porque muchos de los cuentos infantiles, como Caperucita Roja y Hanzel y Gretel. ocurren en ellos. Sea por el motivo que sea, la mayoría de nosotros sabemos que donde haya una amplia zona cubierta de árboles y vegetación, estamos en su presencia. 

Gran Chaco, 2012.

Pero, hay que decirlo, los bosques son mucho más que eso. Si podemos detenernos a observar más allá del entramado verde de ramas, hojas y raíces, seremos testigos de un universo silvestre maravilloso y exuberante que se despliega ante nuestros ojos.

Los bosques son las miles de especies de animales (entre anfibios, reptiles, mamíferos, ovíparos, etc.) que viven en este ambiente, donde lo tienen todo: cobijo, alimento y agua pura. Y donde cientos de distintas aves hacen nidos en las copas, donde insectos de todos los tamaños y colores pululan por el aire mientras hongos de formas y tonos increíbles brotan de los rincones. 

Es decir, está compuesto por toda esta riqueza natural interactuando, generando suelos fértiles y retroalimentando cuencas hídricas que son tan abundantes que proveen de agua dulce a más del 85% de las principales ciudades del globo. 

Una vez que vemos a este ecosistema en toda su mágica complejidad, entendemos con claridad por qué es el hogar de la mayor parte de la biodiversidad terrestre. 

Además, dependiendo de la región del planeta donde prosperen, los bosques se dividen en tropicales, subtropicales, templados y boreales, cada cual con sus características particulares.  

Sin embargo, lo más importante es entender que los bosques no son sólo un paisaje ideal y lejano al que vamos de visita en vacaciones. Debemos apreciar cómo nuestra vida cotidiana  está ligada a ellos de distintas formas que, aunque muchas veces se nos pasan por alto, son realmente indispensables. Te las contamos a continuación. 

Las personas necesitamos de los bosques para vivir

Tal vez no lo sepamos pero muchos de los alimentos que llegan a nuestra mesa familiar provienen de los bosques. Por ejemplo frutos, semillas, raíces y carne silvestre, fibra y forrajes

© Nieves Rodrigues / Greenpeace

Al mismo tiempo, miles de millones de personas cocinan con la energía que se produce a partir de madera y biocombustibles que provienen de ellos (se la llama dendroenergía). 

Pero las formas en que los bosques hacen posible la vida no terminan ahí. También juegan un papel clave en la agricultura porque albergan polinizadores y actúan en el enriquecimiento de los suelos y la regulación del clima y de las inundaciones. 

Como si fuera poco, además de purificar nuestro aire, los bosques sostienen nuestra vida diaria al brindarnos medicina y agua dulce. A la vez, son de importancia espiritual para muchas culturas y fuente de belleza paisajística para todos.

Necesitamos de los bosques para enfrentar al cambio climático 

Otro de los beneficios de conservar nuestros bosques es que son aliados claves para mitigar el cambio climático. Como decíamos al principio, este gran conjunto de árboles absorbe a través de sus hojas el dióxido de carbono de la atmósfera (uno de los principales gases que produce el calentamiento global) y lo fija en el suelo.

Por este motivo es que cuidar su salud, evitando la deforestación y el desmonte como así los incendios forestales, es la mejor forma de ayudar a enfriar nuestro planeta.

Asimismo, contar con zonas boscosas saludables ayuda a enfrentar los eventos climáticos extremos que se suceden cada vez más seguido debido a la crisis climática. Lo hacen gracias a que suelos sanos absorben las precipitaciones abundantes ayudando a prevenir inundaciones y evitando deslaves

Día Internacional de los Bosques: ¿cuál es el eje en 2025?

La importancia de los bosques es tal que desde 2012, la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el 21 de marzo como el Día Internacional de los Bosques. Mediante esta celebración se rinde homenaje a la importancia de todos los tipos de bosques y se intenta generar conciencia al respecto.

En 2025, el tema del día serán los bosques y los alimentos, en el que se difundirá sobre el papel fundamental que desempeñan los bosques para la seguridad alimentaria, la nutrición y los medios de vida. 

Situación de los bosques en Argentina y el mundo

En su conjunto, los bosques cubren 31% de la superficie del planeta. Sin embargo, esta cifra tiende a achicarse ante el avance de las actividades humanas y los peligros que trae la crisis climática. Así es que cada año se pierden 10 millones de hectáreas de bosques a causa de la deforestación y otros 70 millones son devastados por incendios, según datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

Voluntarias y voluntarios con pancarta “Destruir bosques es un crimen”.

En Argentina, estamos en emergencia forestal. En la Patagonia, según reportes oficiales, se perdieron como consecuencia de los incendios forestales más de 50.000 hectáreas de estos ecosistemas en sólo dos meses, el equivalente a dos veces y media la ciudad de Buenos Aires, mientras que el monitoreo satelital que realiza Greenpeace reveló que, durante el 2024, en el norte se deforestaron más de 150.000 hectáreas. 

Si querés saber cómo realizamos el monitoreo de los bosques desde Greenpeace, hacé click acá

La ciudadanía argentina tiene mucha conciencia sobre la gravedad de la situación que atravesamos. Recientemente, más de 260.000 personas de todo el país participaron de una Consulta Popular impulsada por Greenpeace, y el 99% apoyó que se establezcan penas de prisión para los responsables de desmontes ilegales e incendios forestales.

Voluntaria “El desmonte mata”.
Voluntario “Desmontar bosques es un crimen”
Voluntaria “El desmonte mata”.