Los desechos son grandes contribuyentes a la triple problemática ambiental que se está viviendo en el planeta: crisis climática, pérdida de biodiversidad, y contaminación.
Cada año, se pierden o desperdician alrededor de 931 millones de toneladas de alimentos, así como 14 millones de toneladas de desechos plásticos van a invadir los océanos, ríos y ecosistemas claves.
En Colombia, se producen alrededor de 25.000 toneladas de residuos sólidos al día, de los cuáles únicamente se recuperan y reintegran en el ciclo productivo el 13% y el 7% son recuperados y comercializados por recicladores de oficio.
Bogotá genera más de 11 millones de toneladas de gases de efecto invernadero. Los residuos sólidos en la ciudad son responsables de la emisión del 18% (2.090.622) el tercero después del transporte, además de contaminar los cuerpos de agua tanto en la superficie como en los niveles subterráneos por el líquido tóxico generado por la basura.
Considerando que Bogotá está construida sobre humedales, el impacto ambiental debería ser de mayor preocupación.
Sin embargo, los residuos se ven por todos lados, la ciudad enfrenta una mala gestión de residuos, diariamente se acumulan 7.500 toneladas de residuos, de los cuales solo el 17% se recicla.
La Asociación de Recicladores de Bogotá, ARB (Asociación de Recicladores de Bogotá), evitó 407.750 toneladas de CO2 eq, una reducción del 0,21% del total de emisiones de Colombia, que son 1.873.400.000 toneladas de CO2 eq.
- En 2021, Bogotá declaró Emergencia Climática. En su declaración hay dos puntos que hacen referencia directa a la gestión de residuos y al papel de los recicladores. Ellos son:
- Mandato 6: Gestión integral de residuos con inclusión social para la crisis climática – incluye el desarrollo de un plan de acción para reducir, reutilizar y reciclar residuos, así como promover el compostaje; y promover la formalización, empoderamiento y capacitación de los recicladores, así como aumentar la segregación de residuos entre los ciudadanos.
- Mandato 7: Economía solidaria, resiliencia y trabajo decente – promover redes de economía solidaria, alianzas entre grupos comunitarios, sociales y ciudadanos.