Quienes habitamos el Hemisferio Sur tenemos el privilegio de saber que nuestros mares son el hogar de un ser tan monumental como maravilloso: la Ballena Franca Austral (Eubalaena australis, tal su nombre científico). 

Southern Right Whale in Argentina. © Santiago Salimbeni / Greenpeace
Ballena franca austral (Eubalaena australis) nadando frente a las costas de Argentina. © Santiago Salimbeni / Greenpeace

Es en la costa argentina, en los golfos de la Patagonia, donde esta especie vuelve tras 12 meses de embarazo para tener a sus crías, cuidarlas y amamantarlas. 

Llegan a tener un gran tamaño, que varía entre los 13 y los 16 metros y alcanza los 40.000 kilos, y que bien podría impresionar e infundir miedo. Sin embargo, muy lejos de eso, las ballenas tienen un carácter sumamente tranquilo. Con esa misma parsimonia, se desplazan por los océanos Pacífico sur, Atlántico sur e Índico sur a una velocidad de entre 9 a 11 km/h.

Además, son muy curiosas y comunicativas. Un claro ejemplo de esto son las miles de fotos en las que se las ve golpeando sus aletas en el agua buscando conectar con quienes tengan la dicha de cruzarlas. 

En definitiva, estos cetáceos colosales son capaces de convivir en armonía con las personas, a condición de que respetemos su hábitat. Lamentablemente, esto no es posible porque muchas actividades humanas terminan poniendo en riesgo su supervivencia. 

Por eso, el Día Nacional de la Ballena Franca Austral que se conmemora cada 25 de septiembre es la ocasión ideal para volver hablar de la importancia de protegerlas, por su valor intrínseco y por el papel central que tienen en mantener el equilibrio de los ecosistemas marinos

¿Qué peligros acechan hoy a la Ballena Franca Austral? 

Su imponente tamaño y longevidad (su expectativa de vida es de más de 50 años- incluso algunas han alcanzado los 100-) no salva a la ballena Franca Austral de ser una especie vulnerable debido a su lenta tasa de reproducción y a la interferencia humana en su hábitat. 

Las mayores amenazas que enfrenta en la actualidad son:

Las tareas de búsqueda y producción de gas y petróleo en áreas oceánicas.

Por un lado, producen contaminación acústica que deriva del tráfico marítimo y las exploraciones sísmicas, tiene un  impacto devastador en estos cetáceos, que dependen del sonido para orientarse, comunicarse y alimentarse. Asimismo, implican riesgos de derrames que son un riesgo para las ballenas debido a la toxicidad directa del crudo, la contaminación del alimento y del agua.

Las colisiones con embarcaciones son otro riesgo creciente. Pueden resultar fatales, especialmente para las crías. 

El cambio climático que está alterando sus patrones migratorios y la disponibilidad de alimento.

La presencia de desechos plásticos en el océano representa una amenaza constante para su salud.

Enmallamiento en redes y sogas de pesca.

Proteger a la Ballena Franco Austral para proteger la salud del océano y del planeta

Ballena franca austral (Eubalaena australis) nadando frente a las costas de Argentina.

En palabras de Matías Arrigazzi, especialista en biodiversidad de Greenpeace: “La Ballena Franca Austral ayuda a mantener el equilibrio del ecosistema marino, ya que por sus hábitos de alimentación colabora con la regulación de poblaciones de otras especies y, a su vez, los nutrientes de sus heces funcionan como fertilizante”. Al mismo tiempo, explica, cada ballena contribuye al secuestro de carbono y, por lo tanto, a la mitigación del cambio climático

La Ballena Franca Austral es Monumento Natural Nacional 

Ballena franca austral (Eubalaena australis) nadando frente a las costas de Argentina.

Añadimos un dato clave que pone de relieve la trascendencia de la Ballena Franca Austral como especie central de la vida marina en nuestros océanos. 

En 1984, cuando aún estaba amenazada por la caza comercial que casi las lleva al borde de la extinción, fue declarada Monumento Natural Nacional por Ley 23.094, quedando protegida sujeto a las normas establecidas por la Ley de Parques Nacionales, Monumentos Naturales y Reservas Nacionales. 

Esto implica que cada individuo es de hecho un monumento natural en sí. Por eso,  deben contar con protección absoluta, sin importar la zona que estén transitando en sus migraciones. En otras palabras, son como “parques nacionales” ambulantes.

¿Qué evento originó el Día Nacional de la Ballena Franco Austral? 

Esta efeméride celebra el rescate de un ejemplar que quedó enredado en las cadenas de fondeo de un barco en Puerto Pirámides en el año 2002

Garra intentaba liberarse de manera desesperada, pero sin lograr zafarse, hasta que los especialistas de la zona decidieron llevarla hasta la playa para poder cortar la cadena y, de esa manera, lograron salvarle la vida. 

Este acontecimiento fue muy valioso ya que evidenció la importancia de la conexión de un pueblo en armonía con la naturaleza. 

Hoy atravesamos una crisis de biodiversidad marcada por la acelerada desaparición de especies debido al impacto de las actividades humanas. Es urgente tomar conciencia y exigir quese priorice la protección del ambiente porque sólo con océanos sanos y protegidos podremos garantizar el cuidado de las ballenas.

Materiales para seguir trabajando el tema

Te compartimos dos materiales que creamos desde Greenpeace y que son súper útiles para seguir trabajando el tema en el aula:

Serie Lina y los amigos del Arcoiris –
Capítulo 1-
Un monstruo demasiado ruidoso 

Revista Semillas Andinas – Edición sobre los Océanos