No sólo las autoridades pueden transformar las leyes, la ciudadanía también tenemos este derecho. Nuestra participación e involucramiento en asuntos públicos, aunque no seamos representantes de gobierno, es central en la defensa y transformación del planeta y, en este caso, de nuestros océanos.
La participación política no se agota con las elecciones. Marchar, protestar pacíficamente, asociarse en colectivos, organizar mítines, hacer plantones son, por ejemplo, formas de participación política que tienen la capacidad de incidir en la toma decisiones sobre asuntos que nos interesan.
Estas prácticas son, a la vez, el ejercicio de un derecho humano, el de expresar y defender libremente las ideas y lo que nos importa.
Las iniciativas ciudadanas son eso, una de las herramientas que tenemos las y los “de a pie”, quienes no ostentamos cargos públicos, para incidir y participar en los asuntos públicos que nos involucran. Las iniciativas ciudadanas son una de las muchas formas del poder de la gente.
Por eso desde Greenpeace, como parte de la campaña Océanos Sin Plásticos, estamos en busca de 200 mil firmas que respalden una iniciativa ciudadana que llevaremos al Congreso de la Unión.
Esta iniciativa propone reformar la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos a fin de poner el foco en las corporaciones y trasladar a ellas la responsabilidad de poner fin a la contaminación por plásticos, la cual es la causa de muerte de al menos 1 millón de animales marinos cada año.
Y aunque desde Greenpeace llevamos años denunciando esta problemática, las autoridades no han hecho nada por impulsar una ley que esté a la altura del problema. Como sociedad necesitamos actuar y necesitamos que otras 200 mil voces por los océanos se nos unan.
Te enseñamos a firmar nuestra iniciativa ciudadana
Una iniciativa ciudadana es una propuesta de ley o de reforma de ley que presenta y respalda la sociedad civil ante el poder legislativo. Estas iniciativas tienen que ser leídas, discutidas y, eventualmente, aprobadas o rechazadas por el Congreso de la Unión o los congresos estatales.
Para que puedan ser presentadas, las firmas tienen que ser recolectadas por la ciudadanía y estar verificadas por el Instituto Nacional Electoral (INE), es un requisito de ley. Otro requisito es que se reúna el apoyo de al menos el 0.13% de la lista nominal de electores, es decir, cerca de 130 mil personas.
Frente al reto que esto representa, la oficina de Greenpeace, el equipo de voluntariado y otras personas que están uniéndose para la protección de los océanos se están capacitando como auxiliares captadores de firmas para poder hacer esta recolección. Si nos ves en la calle o en stands llamados puntos azules, por favor regálanos tu firma, sólo se necesita una credencial de elector actualizada. Greenpeace no tendrá acceso a tus datos personales, estos permanecerán protegidos y resguardados como lo indica la ley.
Ubica tu punto azul más cercano
Apóyanos a reunir estas firmas. Con las iniciativas ciudadanas, las personas nos convertimos en tomadoras de decisión y demostramos que tenemos el poder de cambiar todo lo que se necesite para que nuestro país sea un lugar más justo, más sano y más digno para habitar.
Une tu firma y deja que nuestra voz ciudadana se expanda como las olas.
*Si no tienes INE, no te preocupes. También puedes respaldar la iniciativa sumando tu firma en esta carta abierta dirigida a otras y otros actores políticos que pueden incidir en esta decisión.