• La industria de los combustibles fósiles y la petroquímica bloqueó avances clave
  • Más de 120 países, entre ellos México, rechazaron un borrador débil e incapaz de responder a la dimensión de la crisis de contaminación plástica
  • La incapacidad de alcanzar un acuerdo en Ginebra debe ser una llamada de atención para el mundo: Greenpeace

Ginebra, Suiza, 15 de agosto de 2025 – Tras dos años de negociaciones sobre el Tratado Mundial de Plásticos, los ministros reunidos en Ginebra se enfrentaron a una decisión histórica en las últimas horas de lo que se suponía sería la última ronda de negociaciones: alcanzar un tratado que abordara realmente la contaminación por plásticos o ceder ante las presiones de la industria petroquímica. 

Graham Forbes, jefe de la delegación de Greenpeace en las negociaciones del Tratado Mundial sobre los Plásticos y responsable de la campaña mundial sobre los plásticos de Greenpeace EE. UU., afirmó:

“La incapacidad de alcanzar un acuerdo en Ginebra debe ser una llamada de atención para el mundo: poner fin a la contaminación por plásticos significa enfrentarse directamente a los intereses de los combustibles fósiles. La gran mayoría de los gobiernos quieren un acuerdo firme, pero se permitió que un puñado de actores que defienden los intereses de la industria utilizaran el proceso para acabar con esa ambición. No podemos seguir haciendo lo mismo y esperar un resultado diferente. Se acabó el tiempo de titubear”. 

“La crisis del plástico se está acelerando y la industria petroquímica está decidida a sepultarnos en aras de beneficios a corto plazo. Ahora no es momento de titubear. Ahora es momento de mostrar valentía, determinación y perseverancia. El llamado de toda la sociedad civil es claro: necesitamos un tratado firme y jurídicamente vinculante que reduzca la producción de plástico, proteja la salud humana, proporcione una financiación sólida y equitativa y ponga fin a la contaminación por plástico, desde su extracción hasta su eliminación. Y los líderes mundiales deben escuchar. El futuro de nuestra salud y de nuestro planeta depende de ello”.

“Necesitamos el Tratado Mundial sobre Plásticos más que nunca, y una vez más ha sido aplazado. Aunque el resultado sea decepcionante por ahora, estas negociaciones demostraron que más de 120 países, entre ellos México, rechazaron un borrador débil e incapaz de responder a la crisis de contaminación plástica que enfrentamos. Aún exigimos un tratado ambicioso y vinculante, con una meta global de reducción de la producción, integrada en un paquete de medidas concretas que incluya medios efectivos de implementación y financiamiento. Es imprescindible garantizar la eliminación de los plásticos y de las sustancias químicas nocivas”, señaló Viridiana Lázaro, especialista de océanos sin plásticos en Greenpeace México.

La presión de los intereses de la industria de los combustibles fósiles y la petroquímica bloqueó avances clave, en donde se priorizaron las ganancias privadas sobre el interés público. Tal como señaló el Centro de Derecho Ambiental Internacional, (CIEL por sus siglas en inglés)  234 lobistas de estos sectores tuvieron acceso a la ronda extendida de negociaciones, y como consecuencia, no se logró alcanzar un acuerdo.

“Desde la sociedad civil, seguiremos alzando la voz, desde lo local hasta lo global, con la convicción de que un Tratado de Plásticos sólido se logrará y marcará el rumbo hacia un futuro libre de plásticos”, concluyó Viridiana Lázaro. 

Para mayor información y entrevistas favor de comunicarse al área de prensa de Greenpeace México con Sara Del Real al 55 40 84 53 20 o al correo electrónico [email protected]