Turismo depredador

No venimos a destruir lo que amamos. El turismo no debe ser una excusa para arrasar con la vida. ¡La selva no se toca!

Fotografía de un hotel

No, la protección del medio ambiente no tiene por qué arruinar el turismo, pero el turismo tampoco debe arruinar el medio ambiente. Ambas actividades pueden convivir si se planea un turismo sustentable que tome en cuenta las características de los ecosistemas y a las comunidades que les habitan. 

México es un país megadiverso, rico en paisajes, cultura y biodiversidad. Podríamos ser un ejemplo global de turismo sustentable, pero hoy enfrentamos un problema urgente: el turismo depredador está arrasando nuestros ecosistemas más valiosos.

Forest Protection Unit in Hainich in Thuringia. © Thomas Victor / Greenpeace

Hoteles de lujo, parques temáticos y complejos turísticos están creciendo a toda velocidad sobre la selva, los manglares, las dunas y las costas vírgenes del país.

Este modelo de turismo masivo y mal planificado, impulsado por grandes empresas, no toma en cuenta las características del territorio ni a las comunidades que lo habitan. Solo busca ganancias, sin considerar el impacto ambiental o social.

? En lugar de conservar, destruyen:

  • Ignoran los derechos de los pueblos originarios.
  • Talan miles de árboles.
  • Drenan y contaminan cenotes y acuíferos.
  • Desplazan especies en peligro de extinción.

Con la llegada del Tren Maya, en la Selva Maya —una de las regiones más ricas en biodiversidad del planeta— se ha exponenciado el desarrollo de megaproyectos turísticos.

En lugar de ofrecer experiencias respetuosas con la naturaleza y las culturas locales, se impulsa un modelo masivo e invasivo, con proyectos como:

  • Xcaret y otros parques que se venden como “naturales”, pero destruyen ecosistemas.
  • Resorts todo incluido que consumen grandes cantidades de agua y energía.
  • Urbanizaciones que fragmentan la selva y amenazan a especies como el jaguar.

? Ejemplo alarmante: Xcaret pretendía construir un parque temático en Uxmal que implicaba la tala de más de 160 mil árboles. Gracias a la presión ciudadana, lo detuvimos. Pero aún queda mucho por proteger.

“Amazon We Need” Expedition in the Amazon in Brazil - Boat "Almirante Moreira VII". © Todd Southgate / Greenpeace
Action at Mayan Train Construction in Mexico. © Gustavo Graf / Greenpeace

Desde nuestros inicios, en Greenpeace hemos luchado para que el desarrollo turístico y económico no ocurra a costa de la naturaleza ni de los derechos de las comunidades.

? Denunciamos proyectos turísticos destructivos
? Movilizamos a la ciudadanía para detener megaproyectos
? Impulsamos el turismo sustentable y comunitario
? Protegemos áreas sensibles como el manglar de Tajamar

Esta lucha ha recorrido todo México: desde Baja California hasta Nayarit, desde Quintana Roo hasta Yucatán. Hoy, la batalla por frenar el turismo depredador se libra principalmente en la Selva Maya.

Turismo comunitario que beneficie a quienes habitan el territorio.

icono defender los principios de la organización

Regulación estricta a la expansión turística en zonas naturales sensibles.

Defensa activa de ecosistemas clave, como el manglar de Tajamar.

No queremos frenar el turismo. Queremos frenarlo cuando destruye.

Background Documentation Amazon. © Greenpeace / John Novis
No podemos quedarnos callados ante la destrucción.

No vamos a retroceder mientras haya árboles que defender, agua que cuidar y voces que levantar. Únete como socio y apoya activamente la defensa de la selva maya.

¡Quiero ser socio!