Por 50 años, Greenpeace ha abierto camino en el movimiento medioambientalista del mundo con acciones no violentas y mensajes creativos que contribuyen a detonar cambios de mente y hábitos para hacer frente a los sistemas que amenazan nuestro medio ambiente.
En Greenpeace queremos vivir en un planeta sano, justo, verde y pacífico. Queremos un planeta donde los bosques prosperen, los océanos estén llenos de vida y donde los animales que alguna vez estuvieron amenazados vivan sus hábitats con seguridad. Estamos convencidas y convencidos de que la calidad de vida se mide en las relaciones con las personas, los animales y toda la vida que nos rodea, no en las cosas que tenemos, por lo que creemos en modelos de consumo menos contaminantes, menos explotadores y mucho más justos y ecológicos.
¿Cómo lograremos este sueño?
Desde el inicio de nuestro trabajo apostamos por tomar acción directa, contundente y pacífica.
Y ahí estamos, navegando en barcos para explorar ecosistemas desconocidos o inaccesibles; evidenciamos negociaciones corruptas que buscan atentar contra el planeta; levantamos mensajes gigantes con denuncias públicas que evidencian los riesgos de la inacción de las autoridades; exigimos de formas creativas alternativas para formas de vida más sustentables; protestamos en de recintos de gobiernos o empresas; ideamos campañas; reunimos firmas; hacemos incidencia con autoridades de todos los niveles; proponemos soluciones; construimos alternativas; y detonamos cambios en las personas.
Para ello, en Greenpeace colaboran personas investigadoras de distintas áreas, abogadas y abogados, expertas de la comunicación, y personal administrativo que hace realidad las tareas de todos los días. Afín con su visión global, Greenpeace está integrada por 26 organizaciones independientes en todo el mundo y una oficina internacional que coordina a todas. Este trabajo no sería posible sin la invaluable acción de las y los voluntarios y los donantes, que nos dan presencia en 55 países.
Greenpeace se caracteriza por gozar de independencia económica, es decir, no recibimos ningún financiamiento por parte de gobiernos o empresas; esto llena de autonomía y libertad nuestras decisiones y estrategias.
Además nuestras acciones buscan siempre ser innovadoras, por ejemplo, en 2020, el equipo de Greenpeace Bélgica protagonizó la protesta más larga de la historia de ese país, la cual empezó un lunes y terminó hasta el miércoles siguiente en las inmediaciones de las instancias gubernamentales para exigir la reducción de los GEI; y en 2021, realizamos una protesta contra la minería marina en medio del Pacífico, a bordo del barco Rainbow Warrior.
La creatividad de las campañas han conseguido que los medios de comunicación de alcances nacionales e internacionales volteen a verlas y multipliquen sus impactos sociales, haciendo que cada vez miles y miles de personas se sumen al movimiento medioambiental y repliquen sus acciones a nivel local.
Greenpeace no trabaja de manera aislada, sino que a lo largo de estos años ha sabido vincularse con otras organizaciones y colectivos que persiguen el mismo fin pero con otras estrategias, herramientas o que inciden de manera directa en las localidades y ciudades en las que se debe tomar acción. El objetivo es amplificar el coraje y el poder de las personas que intentan construir algo mejor.
Tras medio siglo de trabajo, nuestras metas se han vuelto más grandes. Ahora el barco que zarpó por primera vez en Alaska se dirige hacia el objetivo de conseguir la protección global del 30 por ciento de los Océanos; reducir para 2030 el aumento de las temperaturas a un 1,5 °C en lugar de 2°C; detener la sobreproducción de plásticos de un solo uso; proteger la alimentación para que 100 por ciento de los cultivos sean libres de transgénicos; y que las ciudades sean lugares más igualitarios y verdes.
Sabemos que la ambición es grande pero estamos convencidas y convencidos que estos retos no son imposibles de cumplir, siempre que lo hagamos juntas y juntos.
¡Participa y actúa por el planeta! En Greenpeace valoramos tu firma, tu trabajo voluntario y tus donaciones. Con estas grandes acciones nos ayudas a fortalecer nuestro trabajo de todos los días para construir el planeta que soñamos: más verde, más pacífico, más igualitario, más justo y más sano.
Gracias a tu donativo podemos seguir luchando por el planeta.